Quiebra moral de la Iglesia


Satiricosas
Manú Dornbierer

Si sobrevive a la quiebra moral en que se encuentra, la Iglesia del Papa Ratzinger, por más multitudinarias misas que congregue en Roma, no podrá sino recordar con amarga vergüenza la Semana Santa de 2010. Ni el sábado será considerado de Gloria. Ni el domingo de Resurrección. Los curas pedófilos han ensuciado la señera imagen de Jesús. Qué dolor sienten los millones de seres humanos que creyeron en el clero, qué traición de la Iglesia no sólo a los niños víctimas de su perversión, sino a todos los sinceros creyentes que hoy abren los ojos. Claro que hay millones de ciegos fundamentalistas o simplemente de conchudos fanáticos, perezosos mentales que niegan todo porque no quieran pensar y se resguardan tras la comodidad que significa la credulidad dogmática para no ver, para no reflexionar, para no entender, para no indignarse, para no analizar, para seguir creyendo como bovinos, en el clero corrupto que se dice “humildemente” el único representante de Dios en el planeta Tierra: el Clero Católico mayoritario.
Amén de las innumerables acusaciones de abusos sexuales indecentes -criminales, es epíteto más indicado- cometidos contra los niños
del siglo pasado en México y los 22 países en que la Legión de Marcial Maciel tenía y tiene ramificaciones, sin contar además curas monstruosos en ][]Estados Unidos, Irlanda, Alemania, Austria, Italia, Francia etc., países hoy justamente furiosos y alebrestados, en que las escuelas confesionales han sido ¿ya no son? nidos de pederastas y de explotadores económicos, ahora circula en Internet una “historia de Papas” que horripila. Ah, pero no es la primera. Cualquiera que haya tenido un poco de interés en la trayectoria del Papado, habrá leído muchas otras… atroces. Sin embargo y esto es lo inusual, ahora le toca al Papa Benedicto XVI, en activo, explicar su propia conducta de solapamiento a miles de sacerdotes “enfermos” y a su propio antecesor, y según parece a su hermano al que también le hace agua el barco.
¿Y qué podrá decir de otros precursores del siglo XX como Pío XI y Pío XII, firmantes con Hitler de tratados en 1929 y en 1933?
El Vaticano desesperadamente recurre al manto de oscuridad pontificia, de secreto mafioso, que lo ha caracterizado siempre, pero en estos tiempos de comunicación transparente y de Internet ya no hay posibilidad para la consabida práctica del ocultamiento católico, con persignada de rigor.
La carta que hoy circula en la red escrita en 1952 al Papa Pacelli, por Harry S. Truman (presidente de Estados Unidos de 1945-1952) contiene una historia apabullante. Se sabía que Pío XII era antisemita y que no fue precisamente muy activo para oponerse al holocausto y salvar judíos, pero lo que no sabíamos muchos, es que fuera directamente la Iglesia Católica la que impulsara a Hitler a la 2ª Guerra Mundial con tanta enjundia. Y después a la Guerra Fría contra los rusos. Este es un extracto de dicha carta que relata cómo se dio la Guerra, según las informaciones que poseía el mandatario de la potencia americana:
...“Thomas Jefferson, uno de los más sabios de nuestro país, dijo: La historia no nos muestra ningún ejemplo de pueblo alguno manejado por el clero que haya tenido un gobierno civil y libre. Por eso es usted la última persona en el mundo que pueda enseñarme la forma de dirigir a mi pueblo por el camino de la paz. Para refrescar su memoria le recordaré algunos hechos de su predecesor en el Vaticano, el Papa Pío XI, el iniciador de toda agresión fascista en los tratados de Letrán, celebrados con Mussolini en 1929.
Este fue el principio de la traición a la civilización cristiana. Fue éste el comienzo del horror. En esa época muy pocos de los que vivimos en los Estados Unidos conocíamos la verdadera naturaleza del fascismo, como usted y el Papa XI lo conocían, pues fueron los que fomentaron la guerra y aliaron su iglesia a él (al fascismo). Usted mismo fue especialmente preparado, como joven sacerdote y como diplomático de la Iglesia, para el propósito específico de ayudar a Alemania a prepararse para la Segunda Guerra Mundial. Usted y el Káiser urdieron en Suiza las intrigas contra los aliados durante la Primera Guerra Mundial. Usted estuvo doce años en Alemania, en donde tomó parte de la ascensión de Hitler al poder, habiendo celebrado acuerdos con él y con el execrado Von Papen, un segundo Papa, que ayudó a Hitler a tomar el poder y puso firma con la del cardenal Eugenio Pacelli y la de Hitler en el Concordato con el Vaticano, firmado en 1933 Nadie creerá jamás que usted ignorara el complot que Hitler y sus nazis estaban preparando contra nosotros. Después de la firma del Concordato por usted y por Von Papen, y de hacer aspersiones con agua bendita a Hitler, dándole la “impresión” de que resucitaba, Von Papen, que logró escapar de Nuremberg, se jactaba en la siguiente forma: El tercer Reich es el primer poder que no solamente reconoce sino que pone en práctica los altos principios del papado. Sus cardenales y obispos bendijeron en Roma las armas de guerra de los soldados enviados contra indefensos etíopes. Su cardenal Schwester, de Milán, proclamó el robo de Etiopía como una cruzada santa para llevar en triunfo a Etiopía la Cruz de Cristo. Mientras tanto sigue usted llamando a su iglesia la iglesia de Dios y pretende que yo, como jefe de un Estado civil, lo admita a usted como superior a mí y al pueblo de los Estados Unidos de América. Usted habla con palabras melosas sobre justicia y al mismo tiempo hace sonar los tambores para otra guerra, tal vez más terrible que las dos últimas, contra Rusia que nos ayudó a derrotar a Hitler y Mussolini. Usted está incitando a los Estados Unidos para que cuando antes declare la guerra a Rusia, usando los mismos métodos empleados por Hitler para lograr la solidez de sus detestables y diabólicos regímenes. Usted quiere que desperdiciemos nuestro dinero y que enviemos a nuestros jóvenes a una muerte horrible, que sobre los cadáveres de Hitler y de Mussolini terminemos la lucha que aquellos empezaron con ayuda suya y a quienes nosotros derrotamos. Sí, los Estados Unidos de América desean la paz, pues de todas las naciones solamente nosotros quedamos con alguna prosperidad y decencia. Somos el baluarte de las libertades democráticas protestantes. Si nosotros, o la Inglaterra protestante, nos debilitáramos, su cultura católica tendría una oportunidad para gobernar otra vez el mundo, haciéndolo retroceder a la Edad Media. Si perdiésemos o nos debilitáramos con la guerra que usted está provocando contra Rusia, fácilmente procuraría el Vaticano una alianza con ella. Su predecesor el Papa Pío XI, declaró públicamente que él haría pacto con el diablo mismo, si conviniera a los intereses de la Iglesia. Por lo tanto, señor Pacelli, es mi deber como Jefe de este país predominantemente protestante, rechazar sus propuestas a guisa de alianza, de pacto de paz. “Los que comen en el plato en que el Diablo está comiendo, deben usar una cuchara muy larga“. Continuaré mi labor para lograr y mantener la paz como buen bautista, conservando los honrados principios protestantes que hicieron poderosa nuestra nación. El PRESIDENTE DE LOS ESTADOS UNIDOS DE AMÉRICA
Harry S. Truman
(Dentro De la firma en 1929 que determina la creación del Estado Vaticano, existe un concordato con el Tercer Reich firmado por Pío XI, Mussolini y Paccelli). (El 20 de julio de 1933, Von Papen sirvió de representante del gobierno de Hitler en el Vaticano para la firma del reichskonkordat entre la Iglesia Católica y el partido nazi).

RESPUESTA EN LA RED
A TRUMAN DE UN CATÓLICO HOY.
En su investigación histórica “Operación Vicario”, el riguroso historiador francés Paul Rassinier demuestra que Pío XII fue objeto de una campaña calumniosa después de su muerte a raíz de la obra teatral “El Vicario”, dice un lector del autor galo.
“El Vicario”es un controversial drama de 1963 del alemán Rolf Hochhuth que imputa al Papa Pío XII no haber adoptado medidas ni haber expresado una clara posición contra el Holocauso. Ha sido traducida a más de 20 idiomas. L[ a pieza se estrenó en Berlín el 20 de febrero de 1963. La representó en inglés la Royal Shakespeare Company y en París causó verdadera conmoción.
En 2002 dirigió la versión fílmica el prestigiado Costa Gavras y se llamó “Amén”.
El defensor del Pío XII (no menciona a Pío XI) , asegura que Rassinier recopila numerosos documentos, por ejemplo, una encíclica de Pío XII en sus años de cardenal contraria al movimiento de Hitler; el Vaticano instruyó a los clérigos católicos para que exhortaran a su grey en el sentido de no votar por los nacionalsocialistas de Hitler”, pues quizás, pero nunca niega las firmas de los dos Papas de que se trata uno con Mussolini en 1929 y el otro con Hitler en 1933.
Para desacreditar a Truman recurre a argumentos en su contra como que haya ordenado la bomba atómica en Hiroshima y Nagazaki, y habla del racismo gringo contra los negros. De acuerdo, pero, sigue sin negar la firma de los Tratados por los Papas, ergo no deshace ni siquiera desdice las acusaciones del difunto presidente estadunidense. Esto podría ser objeto de renovada investigación, pero mientras, lectores, reciban un regalo de Pascua.

EL PADRE NUESTRO. En traducción directa del arameo. De esta oración derivó la versión actual del “Padre Nuestro”, la oración ecuménica de ISSA (Jesucristo). La oración está escrita en arameo, en la forma en que era invocada por Jesús, sobre una piedra blanca de mármol en el Monte de los Olivos en Jerusalén, Palestina. El arameo es un idioma originario de la Alta Mesopotamia (siglo VI A.C.), y la lengua usada por los pueblos de la región. Jesús siempre hablaba al pueblo en arameo. La traducción del arameo al español (sin la interferencia de ninguna institución religiosa), nos muestra cuán bella, profunda y verdadera es esta oración de Jesús,
“Padre-Madre, Respiración de la Vida. Fuente del Sonido. Acción sin palabras. Creador del Cosmos. Haz brillar tu luz dentro de nosotros, entre nosotros y fuera de nosotros para que podamos hacerla útil. Ayúdanos a seguir nuestro camino respirando tan sólo el sentimiento que emana de ti. Nuestro Yo, en el mismo paso, pueda estar con el Tuyo, para que caminemos como Reyes y Reinas con todas las otras criaturas. Que tu deseo y el nuestro sean uno solo, en toda la luz, así como en todas las formas, en toda existencia individual, así como en todas las comunidades. Haznos sentir el alma de la Tierra dentro de nosotros, pues de esta forma, sentiremos la Sabiduría que existe en todo. No permitas que la superficialidad y la apreciación de las cosas del mundo nos engañen, y nos libere de todo aquello que impide nuestro crecimiento. No nos dejes caer en el olvido de que Tú eres el Poder y la Gloria del mundo, la canción que se renueva de tiempo en tiempo y que todo lo embellece. Que tu amor esté sólo donde crecen nuestras acciones. Que así sea”.
(Gracias, al amigo Rodrigo Juárez, por esta reconfortante transmisión de una oración verdaderamente espiritual).

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