NUESTRA CLAVE
Pocos se acuerdan de esto ahora, pero la iglesia se reservó el derecho de dirigir, desde el púlpito y el confesionario, la política de los países latinoamericanos. La oportunidad que tiene de probar que esto es así, se presenta justamente en las elecciones mexicanas para la renovación de la cámara de diputados. De ahí la importancia del PECA (Partido de Ernesto Corripio Ahumada).
...
... Usted estaría en su derecho al pensar que el papa Wojtyla, "profundamente anticomunista", no sólo vino a México para grabar discos o para escuchar mariachis, sino para preocuparse por la suerte del "pueblo de Dios" ante la evidente amenaza castro-marxista y judeo-masónica-comunista que se expresa con el despertar de movimientos como la reforma política, que permite la actuación de abominaciones tales como el PCM, el PRT, el PMT, etc.
El papa Wojtyla aprobó recientemente en Roma el documento final de la reunión de Puebla (CELAM III), en donde la iglesia declara que se reserva el derecho de "evangelizar lo político" (¡Rediez: sic!).
...Dice que en sentido "amplio y superior", pero que tiene relación con asuntos tan concretos como "la seguridad exterior" del Estado, "la política interesa también a la iglesia y, por tanto, a sus pastores, ministros de la unidad".
¿Serán ministros de la unidad de centro-derecha, o del PAN con el PRI? ¿Y los otros miembros del mismo "pueblo de Dios" a quienes le da la gana militar en el PRT y el PMT, estarán excomulgados si no se someten a "la unidad"?
“Los pastores, por el contrario, puesto que deben preocuparse de la unidad, se despojarán de toda ideología político-partidista que pueda condicionar sus criterios y actitudes. Tendrán así la libertad para evangelizar lo político como Cristo desde un evangelio sin partidismos ni ideologizaciones. El Evangelio de Cristo no habría tenido tanto impacto en la historia, si El no lo hubiera proclamado como un mensaje religioso, superando la tentación de mezclar 'las cosas de Dios con actitudes meramente políticas'. (Juan Pablo II, discurso apertura III Conferencia General.) Los sucesores de los Apóstoles deberán, evidentemente, seguir este camino."
Ahora bien, ¿cómo se llevara a cabo esta "evangelización de lo político" concretamente en cuanto se refiere a la presente campaña electoral en México? ¿El PECA actuará sólo desde los púlpitos y confesionarios o también ira a las plazas públicas?
...
Cuantos conocemos el carácter pétreo de don Ernesto, podemos estar seguros de que jamas aceptaría rendir malas cuentas a la Conferencia Episcopal Latinoamericana. Esto significa que el PECA actuará, con registro o sin él.
Y entonces se verá cuan pronto don Ernesto ha descubierto que la política es como el embarazo: se está o no se está. Ni siquiera como un milagro una dama puede decir que está "un poquito" embarazada. De modo, pues, que si la iglesia en México comienza a sentir mareos políticos, ni duda cabe acerca de cuál es su problema, y ya sólo queda esperar resultados.
Excélsior, 16/IV/79
BUENDÍA, M. La Santa Madre. Editorial Océano (Fundación Manuel Buendía). México, D.F. 1985. Pag. 149.
Visos de tormenta en Cuernavaca. Unas tardías lluvias nocturnas nos alivian un poco del asfixiante calor tropical. Una revolución verde amenaza con invadir esta zona del territorio morelense. Difícil es adelantar, sin embargo, si la cantidad total de precipitación será lo suficiente para normalizarse, y aminorar los efectos de la sequía.
Muchísimo más complicado será liberarnos de los perversos efectos del neoliberalismo, que en México ha tenido como eficiente aliado al fraude electoral. ¿Tiene actualmente un color definido la Resistencia Civil Pacífica (RCP)? ¿Qué ha significado para el país su presencia política? ¿Cuál sería hoy el diagnóstico sociológico de su impacto en la sociedad mexicana contemporánea? Mejor organizado y más duradero que en 1988, el fraude ha sido la causa, el leitmotif, the reason, el quid que amalgama a nuestro movimiento, y que debería impedir la individualización de nuestra propia lucha.
¡Péguele al líder!
Aplíquemos nuestra famosa táctica (¿otra vez?) del cuarto pá las doce. Oh, no! No fue una provocación del tribunal expedito e infalible, tampoco es una ocasión de oro pa´la tribu de Los Chuchos. Olvide el equilibrio en el comentario, fuera la mesura informativa, despojaos de la objetividad noticiosa, our time has come! We are not gonna have another opportunity like this again. Remember that I pay your bills, you are not here to think, you are here to obey, just destroy him! Podrá usted estar o no de acuerdo con sus tácticas, pero ¿quién es este ciudadano –como usted o como yo- todopoderoso que es capaz de despertar tales reacciones? ¿Quién es este liderzuelo que puede convocar a las masas sin necesidad del espacio radioeléctrico en horario triple A? ¿A quién le pertenece este, a veces irracional, apoyo popular?
¿Y el jefe supremo?
No voy a escribir una carta de peticiones al ejecutivo. Tampoco ha de ser un desahogo estéril hacia la “figura presidencial”. Quiero, en contraparte, llamar la atención de todos ustedes, para acusar la falta de un estadista del tamaño de la crisis socioeconómica que vive actualmente nuestro país; aquel que, fuera capaz de conciliar las diferentes fuerzas sociales en un sólo proyecto de nación; un dirigente que concibiera un México mucho más allá del monotemática Guerra contra la Delincuencia Organizada; un político avezado que hubiera ya resuelto alguno (tampoco quiero pecar de ambicioso, comp@s) de los grandes retos nacionales. ¿O será que el actual mandatario carece de un super-asesor que le dé el ancho?
¿Y los contrapesos?
Se me podría acusar de exagerar la responsabilidad del titular del ejecutivo en el penoso estado actual de la República Mexicana, y si hemos de ser justos tendría que darles la razón si México fuera una República Federalista funcional. No lo es, y dista mucho de serlo. El Poder Judicial se ha encargado de prostituirse hasta el oprobio que no merece ni el menor de mis comentarios en el post.
Las próximas elecciones intermedias tienen básicamente el objetivo de renovar el congreso mexicano. ¿Cuál es la evaluación de la labor legislativa de nuestros representantes populares en ambas cámaras? Veamos, una reforma energética que abre las puertas a una privatización velada de nuestra industria petrolera. Una reforma integral del Estado Mexicano pendiente. Un respaldo a la política injerencista e intervencionista de nuestro poderoso vecino norteño. Un desdén por impulsar una política migratoria conjunta que alivie las difíciles condiciones en las que viven miles de paisanos en los Estados Unidos de Norteamérica. Una penalización excesiva de “la disidencia” interna. Una permisibilidad cómplice que alienta la militarización del territorio mexicano. Una alianza con el ejecutivo para intensificar la carga fiscal en los ingresos petroleros y los causantes cautivos (pequeños y medianos empresarios), dejando libres a los “grandes evasores fiscales”, que poco contribuyen al desarrollo del país (sí, usted también Mr., que sabe de cambio climático lo que yo sé de prestanombres). Nos ha legado también una Ley Televisa lesiva para los intereses de la nación (muy favorable, sin embargo, para los grandes capos de los medios de comunicación nacionales, ¿verdad Don Beltrone?). De la misma forma nos hereda una frustrante e indolente voluntad para proponer elevar a rango constitucional federal las figuras del plebiscito y el referéndum (mucho más efectivo, “tal vez”, que el voto nulo o la reelección legislativa). Por último, nos transmite una Alianza para la perversión (olvídese de que la televisión es la segunda gran educadora, desde hoy asume el monopolio de la ignorancia en México), perdón, la calidad de la educación que nos sumerge en la profundidad de las cloacas of the educational performance entre nuestros socios de la OCDE.
¿Perdimos, ganamos, igual participamos?
Ese es el México que nos tocó vivir, comp@s. ¿En verdad deseamos transformar política y socialmente al país? Pues para lograrlo tenemos que comenzar por democratizar nuestra vida pública, erradicando la tóxica cultura del fraude electoral. Propongo que esa sea la última táctica clave de propaganda de nuestra lucha rumbo a las urnas; el fraude es la razón por la que nos levantamos pacíficamente hace tres años, para terminar con la nuestra legendaria apatía nacional en cuanto a la participación política. Más que resumirlo en un “ni un fraude más”, deberíamos enfocarnos en encontrar las herramientas que nos ayudaran a prevenir y de ser posible eliminarlo de nuestro código genético. Conviene pues hacer nuestro mejor intento este 5 de julio para mantener viva nuestra resistencia y, en consecuencia, un proyecto de país distinto acorde con el México actual. AL TIEMPO.
M@RConteo-Ciudadano;
Cuauhnáhuac, Mor(ralote);
19/06/09.
... ahora vienen el DIF y la SEP a escena.
ENCORE MNEMOTÉCNICO:
This is the kind of minor issues I will keep on fighting for restlessly.
No comments:
Post a Comment