SATIRICOSAS 8 de mayo 2010

VIAJE A YUCATÁN.

La península es en todos sentidos un lugar muy especial de México. En materia marina es especialísima, envuelta en sus costas de filigrana conectadas con los cenotes, ríos subterráneos y los jardines de coral que la rodean, tan importantes como puede ser la Barrera de Coral en Australia. El CINVESTAV, Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional, está por fortuna debidamente estructurado en estos tiempos para cuidar la costa peninsular. El Dr. Romeo de Coss, Director de la Unidad Mérida, chiapaneco de origen, explica la instalación en curso de la estación marina de Telchac, dependiente directa del CINVESTAV de Mérida hacia varias importantes metas.

Las islas de barrera, dunas, rías y ciénagas que conforman el paisaje costero del estado de Yucatán, genéricamente llamados humedales, son ecosistemas muy frágiles y de gran importancia por su productividad, biodiversidad y por los servicios ambientales que prestan a nivel local y planetario. El ordenamiento ecológico es base fundamental para la conservación de estos ecosistemas tan singulares y valiosos. Los programas de ordenamiento ecológico buscan regular los usos sociales y productivos de los recursos naturales y aplicar medidas de restauración y conservación, tomando en cuenta tanto las características naturales del territorio como los intereses de los distintos actores económicos y sociales vinculados a él, buscando crear consensos y resolver conflictos mediante procedimientos participativos.

Vine a Yucatán a presentar mi libro “Memorias de un Delfín”, cuya propia meta es esencialmente la de crear conciencia sobre la especie inteligente de los cetáceos y la necesidad de que la humanidad deje de considerar al planeta como su propiedad particular explotable a su antojo y capricho. Encontrar interlocutores como el Dr. Coss es un consuelo a la rabia que millones de personas sentimos contra la explotación inicua del planeta que en las ultimas décadas ha propiciado el ciego neoliberalismo. Y también una esperanza de que las cosas verdaderamente pueden cambiar.

Los litorales de la península que comprende los estados de Campeche, Yucatán y Quintana Roo, han sido especialmente atacados por el neoliberalismo que los gobiernos prianistas mexicanos adoptaron como religión. La sobreconstrucción alrededor de la península, que naturalmente ha puesto en jaque la delicadeza y la complejidad de la costa descrita más arriba, es alarmante y sin embargo no resuelve las necesidades económicas de los peninsulares yucatecos, pero en cambio vuelve millonarios a otros peninsulares, los españoles con los que este gobierno pactó TODO. Campeche, que se había salvado de construcciones indebidas sobre la playa a diferencia de Yucatán mismo y Quintana Roo, en donde los hoteles españoles y otros están literalmente sobre el mar, por cierto como el recientemente construido por el ex gobernador de Yucatán, Patricio Patrón Laviada, cuyas ineptitudes y robos desacreditaron totalmente al PAN en la península y por fortuna impidieron que los Mouriño también se apoderaran del gobierno de la entidad. Pero hoy está siguiendo la pauta hotelera a ultranza que afecta gravemente la costa. Los mismos Mouriño han causado grandes daños a los manglares en una inmensa extensión… y siguen. Ojalá el CINVESTAV de Mérida pueda influir para bien sobre la costa campechana sin que importe la frontera política. La naturaleza no tiene fronteras.

El CINVESTAV abrió el año pasado, para ser exactos el 19 de noviembre de 2009, su estación marina de Telchac, sobre la playa, el Observatorio del Mar y de los litorales, llamado Jacques- Yves Cousteau en honor del hombre que abrió al ciudadano común del mundo los mares con su invención del acqualung y del que se celebra el centenario en este 2010.

Invitada por Proyecto Yucatán, que preside un humanista singular, Jorge Dilio Buenfil Arjona, en estos momentos candidato a diputado por el Tercer Distrito de Mérida, fui esta semana a presentar al Instituto Tecnológico de Mérida y a la Universidad Autónoma de Yucatán, mi libro “Memorias de un Delfín”, al que seguiré impulsando por razones obvias y citadas, pero hoy además para atraer la atención sobre lo que se está haciendo en estos días contra las ballenas, a saber se ha vuelto a permitir la cacería, después de 24 años de prohibición. Y por otra parte salió a la luz la verdad sobre como Japón trata a los delfines para comerciar con ellos o para hacer de estos divinos cetáceos vil carne de pescado. El documental “The Cove” que ganó el Oscar debería conocerse en todo el planeta. Habría que preguntar a la ONU si no piensa hacer nada al respecto, y asimismo si también se va a quedar indiferente ante el derrame petrolero, el más grande de las historia que propició la ineptitud de la petrolera gringa en el Golfo de México y que naturalmente afectará los litorales no sólo de Estados Unidos sino de México.

Ya basta de nada más ocuparnos de las sordideces cotidianas político-calderónicas que abruman a México - demenciales llamó el diario Por Esto el día que llegué, por cierto, para ir al soberbio concierto de Joaquín Sabina, las declaraciones en Alemania de FCH en las que se dio el lujo de inventar hasta un quinto caballo del Apocalipsis, sin rubor ni respeto a la inteligencia y cultura de sus oyentes germanos, y de haberlo vencido con los otros cuatro. Es muy importante crear conciencia sobre lo que le puede suceder a este planeta, nuestro hogar, en estos momentos agredido al grado de rebelarse mediante el cambio climático. O quizás deberíamos estudiar la posibilidad de que sean los monstruos Bush los que están aprovechando las famosas Profecías Mayas para tocar su imperial ¡arpa de Haarp! en Alaska para sacudir criminal y artificialmente al planeta con la sencilla tecnología que le robaron a Nicolás Tesla, ayudante de Edison. Estamos viendo como lo anunciaron las Profecías, terremotos con 200 mil muertos en Haití, en Chile y ahora Perú, con quien sabe cuantos y con un ilógico e incapaz presidente de derecha que no venía a colación ya que la izquierda tenía un 84% de aceptación, en Mexicali, en China con 250 mil muertes, a Europa tapada por una nube de cenizas que impidieron los vuelos con costos altísimos, etc. Para Haarp no debe ser difícil detectar las zonas tectónicas frágiles y actuar sobre ellas.

BALLENAS.

Para finalizar, me permito reproducir parte de un reportaje elocuente a propósito de ballenas. Un grupo de científicos japoneses explican en la revista Polar Biology, su postura, matar ballenas para estudiarlas. Es la excusa que viene dando Japón desde 1986 para cazar ballenas, a pesar de la prohibición.

Imagen National Geographic

La ballena en cuestión es la minke, y los japoneses cazan 850 al año, y su justificación, es que para poder estudiar bien si tienen o no una buena alimentación hay que medir la grasa del eje. La 62 Comisión Ballenera Internacional, en el marco de la XXXIII Reunión Internacional para el Estudio de los Mamíferos Marinos, en Xalapa, Veracruz, del 2 al 6 de mayo condenó a muerte a las ballenas. A ver que pasa en la próxima reunión de junio en Marruecos. Los japoneses cazan 850 ballenas minke al año. Los científicos japoneses han analizado 4704 ballenas cazadas por el Programa de Investigación Japonés de Ballenas desde 1987 a 2005. Concluyen que el grosor de la grasa corporal de las ballenas se ha reducido en un 9 por ciento en esos 18 años. Sugieren que puede deberse a el calentamiento global y la reducción de la población de krill asociada, y a competencias con otras especies de ballenas, o una combinación de los dos factores. Los autores dicen que matar a las ballenas es la única forma en que pueden medir esto. Pero otros científicos y los grupos ecologistas lo niegan. Fuente: National Geographic

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