En 2008, la planta productiva ubicada en México vendió mercancías al exterior por 292 mil millones de dólares, 7.3% más que en 2007, y el país adquirió del exterior -309 mil millones, 9.5% más. La diferencia representó un déficit comercial de -16 mil 838 millones de dólares en el año (Gráfico 1).
Por grandes rubros de la clasificación arancelaria, el balance de productos Agropecuarios y alimentos registró un déficit de -5 mil 920 millones de dólares (mdd); el de Minerales y Químicos, de -7 mil 444; el de Curtiduría y peletería, de -754 millones; el de Productos forestales e industria gráfica, de -5 mil 871; el de Textiles, calzado y ropa, de -1 mil 993; el Minero-metalúrgico de -5 mil 855, y el de Manufacturas diversas, de -1 mil 449 mdd. El único rubro superavitario fue el de Maquinaria y equipo de transporte, con 15 mil 809 millones de dólares a favor (Gráfico 1).
Siguiendo el ciclo depresivo de Estados Unidos y la caída del precio del petróleo, las exportaciones mexicanas se han reducido casi a la mitad en los pasados seis meses, de 27 mil 576 millones de dólares en julio de 2008 a 15 mil 232 en enero de 2009. Las importaciones han seguido una trayectoria similar, cayendo de 28 mil 763 millones en julio a 16 mil 789 en enero (Gráfico 2).
La balanza petrolera
En retrospectiva de los pasados 15 meses con información disponible, la producción mensual de petróleo ha disminuido de 2 millones 888 mil barriles diarios (mbd) en noviembre de 2007 a 2 millones 685 mil en enero de 2009 (Gráfico 3).
En ese lapso, las exportaci-ones bajaron de 1 millón 872 mbd en noviembre de 2007 a 1 millón 366 en enero de este año.
En el mismo periodo, el pre-cio promedio mensual de la me-zcla mexicana pasó de 80 dólares por barril en noviembre de 2007 a 120 en julio de 2008, y de ahí a 33 dólares en diciembre y a 38 en enero pasado. Estas variaciones tan descabelladas de precios (que se dieron en todos los crudos de referencia), hay que recalcarlo, sólo corresponden en mínima parte a las variaciones reales de la oferta y la demanda globales de petróleo, y han sido en lo sustancial impulsadas por fuerzas especulativas, que han convertido a los mercados internacionales de materias primas, alimentos, monedas, valores, metales preciosos y todo cuanto está a su alcance, en una ruleta, en una economía casino sin reglas, sin árbitros y en manos de tahúres.
Vista en conjunto anual, la balanza petrolera de México fue superavitaria en 14 mil 365 millones de dólares en 2008; sin embargo, analizando sus resultados por trimestres, en el cuarto México cruzó el umbral y pasó de ser un país superavitario en hidrocarburos a ser un país deficitario; en dicho trimestre, un déficit de -375 millones de dólares sintetizó la irresponsabilidad de los recientes gobiernos (el actual no atina ni a decidir dónde construir una refinería) y el destino nos alcanzó, pues por primera vez en décadas el país importó en un trimestre petrolíferos (combustibles y otros) por un monto superior a lo que exportó de petróleo crudo y derivados (Gráfico 4).
Origen y destino del comercio
No obstante las fuertes variaciones comerciales ocasionadas por la crisis, la estructura origen-destino de nuestras compras y ventas sólo se modificó marginalmente (Gráfico 5).
Estados Unidos siguió siendo el destino de 80.1% de las exportaciones y el origen de 49.0% de las importaciones; China, por el contrario nos vende 11.2% de lo importado, pero sólo nos compra 0.7% de lo exportado.
UNIDAD TÉCNICA DE ECONOMÍA SA de CV • ciudad de México • Teléfono / Fax: 5135 6765 • unite@i.com.mx
No comments:
Post a Comment