Wednesday, May 02, 2012

EL PODER DEL CONSUMIDOR








La patria entera pregunta: ¿por qué los empleados públicos que elegimos como nuestros gobernantes no tienen que cumplir nunca con las expectativas del cargo que les fue conferido? El Nigromante decía que es tan sencillo gobernar una nación que las monarquías le confieren esta actividad a un niño heredero. La constitución mexicana debe autorizar al pueblo para echar a la calle sin ningún miramiento a los malos gobernantes, como sucede con todos los ciudadanos comunes. La verdad a todas luces es que los partidos políticos eligen a los servidores públicos para manejar sus agendas privadas y no tienen el más mínimo compromiso con la sociedad en general. Por ello, la revocación del mandato debe ser un arma pacífica de la nación para obligar a la burocracia a trabajar de acuerdo con las expectativas del pueblo y no de los grupos de poder. Un alto funcionario del gobierno en el siglo XIX, cuando El Nigromante le reclamó por el recorte presupuestal en el rubro de la educación pública, le respondió con las siguientes palabras tan intemporales como vigentes: “Ramírez, no sea usted ingenuo. ¿A quién le importa el pueblo y su bienestar?” La revocación del mandato consterna al poder público porque no saben hacer más que proselitismo político. Los ciudadanos comunes nos preguntamos: ¿por qué la nuestra es una de las pocas constituciones del mundo que no prevé el despido de funcionarios corruptos o incompetentes aun cuando, según los legisladores, es una de las más avanzadas sobre la faz de la tierra?



¿CONSTITUCIÓN O REVOLUCIÓN?


... El padre de Ignacio fue José Lino Ramírez, personaje muy importante en el período de la independencia nacional, ya que para los años 1805 y 1810 fungió como interventor de rentas del Estado de Querétaro y conspiró con Josefa Ortíz de Domínguez en la gesta de independencia nacional. Para el año de 1833 llegó a ser vicegobernador de Querétaro aun cuando pasaba grandes temporadas una casa de su propiedad en la ciudad de San Miguel de Allende, Guanuajuato. En esta casa había una habitación al fondo, llamada la pieza de costura, donde Lino Ramírez elaboraba perdigones de plomo, municiones y pólvora de carbón y nítrato para las tropas insurgentes del cura Hidalgo. Cuando los realistas, acaudillados por Calleja, lo descubrieron en esos menesteres, se lo llevaron preso a la Ciudad de México a la sede de la Santa Inquisición, en el siniestro palacio de la calle de Santo Domingo, en la actual plaza de Santo Domingo. Durante el interrogatorio, los curas del Santo Oficio, y con la “gracia del señor”, le quebraron las dos piernas, lo sometieron al potro del tormento y a una bota de fierro llamada “el borceguí”, la que se calentaba en llama viva para que se confensara todo pecado en contra de la fe y del gobierno español. Los amigos masones que estaban presos también, le dieron algunos secretos a Lino Ramírez para aguantar el castigo, como vendarse los pies con trapos mojados. En tanto, su esposa, Sinforosa Calzada, por orden del inquisidor mayor de la ciudad de San Miguel el Grande -un cura que por cierto era tan honorable que enfrente de su casa tenía una amante, a la que visitaba por un túnel subterráneo que conectaba las dos casas (la amante del clérigo vivía como reina con los diezmos y las limosnas del clero)-, como todas las mujeres insurgentes de varios estratos sociales fue confinada al convento de las monjas de esa población, y se la obligó a pagar su comida con trabajo. Con siete meses de embarazo fue obligada a fregar los pisos del convento “para quitarle la soberbia inaudita”. Pero como en la vida se paga todo antes de que nos vayamos, según dice el refrán popular, años después, en 1861 su hijo Ignacio Ramírez ejecutó las leyes de Reforma, que él mismo redactó, expulsando a esa orden religiosa para siempre de ese inmueble infernal en el que se cometieron tantas vilezas inenarrables y donde tantas lágrimas derramó su madre. Actualmente es el Centro Cultural El Nigromante. En el fondo de la iglesia contigua al convento de las monjas diabólicas hay una reja de hierro en la que según una tradición ancestral, los domingos después de la misa de las doce del día ponían entre los barrotes de las rejas a las prisioneras para que por “piedad” alguna persona se conmoviera y les diera algo de comer a las damas cautivas o les regalara alguna vestimenta. Todavía se pregunta la gente hasta nuestros días si fueron o no justas las benditas leyes de Reforma. …

Ya muy anciano El Nigromante afirmó que la persona que inspiró todos sus actos personales fue su padre, Lino Ramírez Galván, del que no era digno de pronunciar su sagrado nombre. Lino Ramírez decía sobre los conservadores:


Esos personajes conservadores recalcitrantes perseguían al igual que Iturbide, el convertir a la nación con la ayuda del clero en una monarquía absoluta, pero no tenían el mínimo talento para tal proeza nacional, ni siquiera supieron fundamentar correctamente esos deseos nefastos, porque si se le dice al pueblo pobre: “calma, ponte de nuevo los grilletes de la esclavitud modernizada”, por supuesto que la rebelión social estalló y como buenos conservadores creyentes de doble moral, no le dieron garantías individuales a los ciudadanos, por el contrario apagaron la inconformidad social en mares de sangre, miseria y excomuniones. 


Lino Ramírez, julio 14 de 1845.




… Cuando Ignacio Ramírez y Guillermo Prieto estuvieron presos por órdenes del algún tirano de opereta de los que gobernaron México, los dos lograron escapar. Sobre este asunto hay una anécdota muy simpática durante la estancia de ambos en la prisión detenidos al patio para que se asolearan por una hora, el único que salía con grilletes en manos y tobillo era Ignacio Ramírez, al que no había podido doblegar ninguno de los mediocres con poder con los que tuvo que combatir toda su vida por defender sus convicciones. El caso fue que tratando de hacerse el simpático uno de los centinelas de vista que lo cuidaba le preguntó al Nigromante: “¿Qué tal licenciado, qué dice la calor?” A lo que Ramírez respondió: “¡Que es masculino! ¡El calor!” Indignado, el centinela lo mandó a la celda de castigo con Guillermo Prieto. Después de algunos días llegó el mismo militar y preguntó: “¿Quiénes quielen salir de la celda?” A lo que el Nigromante respondió: “¡Tolitos, tolitos, tolitos!” Días después se escaparon Ramírez y Guillermo Prieto según lo informó el Diario Oficial de enero de 1858. Prieto disfrazado de anciano con una barba postiza y El Nigromante disfrazado de jornalero. Ignacio Ramírez era muy alto para aquellos tiempos, ya que medía 1.85 de estatura, y Guillermo Prieto era muy bajito. Pero los conservadores lograron atrapar de nuevo a Ignacio Ramírez en Querétaro y para su desafortunada suerte el general a cargo del batallón militar era nada menos que el temible Tomás Mejía le conmutó la pena de muerte, por el “escarnio público”. Amarraron a Ramírez de un burro y lo pasearon por la ciudad. La gente lo insultaba diciéndole: “Jacobino, hereje, impío, masón, liberal apóstata...” Lo golpearon cobardemente y luego de pie lo enviaron de nuevo a la prisión de Tlatelolco de la capital de la República. Qué irónico que en esa ciudad muchos no supieran que el padre de Ignacio Ramírez había sido el vicegobernador de Querétaro. Tomás Mejía le dijo al Nigromante que cómo era posible que avergonzara a su padre con esas ideas insensatas llamadas liberales, y él le contestó: “Seguramente él estará feliz, pues de quién cree que heredé lo revoltoso, pero sabe general, Querétaro es el termómetro de la República, disfrute su efímero triunfo. En Querétaro también sucumbirán sus pretensiones conservadoras”. En efecto, no se equivocó Ramírez en ese vaticinio. En 1867 cayó Querétaro, con su emperador de opereta Maximiliano de Habsburgo, acompañado en el paredón de fusilamiento por sus generales conservadores.






ARELLANO, E. La Nueva República. Editorial Planeta. México, D.F. Primera Edición. 2012.


Empieza Mayo, y parece que ha comenzado la temporada de lluvias, at least, parcialmente al sur del Trópico de Cáncer en nuestro país; y en pleno día del niño me han obsequiado mi primero del ídem. Con tal de que no se me acuse de tergiversador de la realidad, dígamos que esta vez a pulso me lo gané.



El juicio que solo llega con la madurez, no se compra en la tiendita de la esquina: double-dip, L-type, W-shape recessions, and jobless recoveries, siguen inundando las primeras planas de los principales diarios de este mundo.



Un montón de money junkies mientras tanto, continúan inmersos en su frenesí apostador dentro de las entrañas de los pisos de remates más importantes de nuestro planeta. Insignificante es (siquiera) la consideración de lo que sucede en las calles aledañas a estos contemporáneos mercados de lo virtual: si no quedó registrado en bits entonces no sucedió.

“El debate en mis pantallas no se va a transmitir” -anuncia desafiante, por medio de una cadena de bits, uno de los malcriados miembros del club de Tobi del que ya les hablé; y agita varias veces el petate del muerto para espantar a uno que otro camarada que padece teleadicción. Tal vez, él mismo pretenda ignorar o despistar al respetable, despreciando el dato duro de que el juguete más caro de ciertos tycoons es el fútbol. En aquellos lejanos días de las religiosas visitas de mi familia al coloso de la “Unidad Nacional”, el oro negro pagaba tanto los salarios de los que vivían de la patada como de las francachelas de su patrocinador. A lo mejor lo tienen mal informado, pero en las mega-ligas (ustedes son solo pésimos remedos, en realidad), han tenido que alargar las jornadas, programando monday-night matches para atraer a los más fastidiados de sus fans. If they would get profits, then where are they coming from? Tarea; Calcular en porcentaje los ingresos de los clubes en: entradas a los estadios; publicidad en las camisetas; venta de chelas, refrescos y comida chatarra en las tribunas; pago de derechos de transmisión por televisión; regalías por comerciales durante el medio tiempo (mmm, hoy en día hasta la exposición efímera durante el curso del partido de un buen par de... zapatos de fútbol son bien vendidos en las flat screens) etc.



_ You see? It's not “always” better to buy in the marketplace? -me reprende mi mujer. Sometimes, things are more expensive here.
_ Seems, you didn't even open the email I sent this week to you, babe -I strike back at her rebuke. It is not about the price, luv. Remember?
_ Is it not? What is that, then? -me pregunta entrecerrando sus ojos más.
_ It is not in fact, my dear. You think, I haven't realised some of them are selling the same products as in the supermarkets? Yes, I have; but I know that at least here, I push the money around much more than there, and Thanks God your niece, no matter needed to be in the waiting list, didn't end up in one of those big department stores with a tiny salary for life -y esta vez parece que la sola referencia a su sobrina preferida la convenció.


Olvidé solo comentarle un secretillo: el otro día que fuí, by my own, la marchanta del mercado local me regaló, por mi pura fidelidad, un mango como pilón. Seguro ustedes no ignoran que abundan las historias en que un@ camarada es arrastrado entre crujías, por el solo pecadillo de “carranciarse” un bolsa de PAN para a la prole alimentar.


Se lo... resumo, pues. Tiemble usted porque, superando nuestra mítica indolencia, una avispada cuata del movimiento lo publicó antes que yo. Le vamos a... aplicar la Mc Libel style Campaign: ni un solo minuto de tele (marcación especial a los comerciale$) durante la liguilla (de hecho tuvieron que partir el antiguo en dos torneos cortos, ya sea por la avaricia de sus compas, o pa demostrar el exitazo de su national league) del fútbol mexicano. No se preocupe, ya no voy a tener money, pa mantener el patrimonio de mi esposa (a la más recomendable de las actuales inversiones -su impresionante pendiente debe hoy superar a los hidrocarburos, la trata, y la venta de armas, según mis observaciones- no le pienso entrar, como mi abuelo -el adoptivo, el mero, mero quién sabe si todavía respirara-, con las tripas no especulo yo). No apuesto mucho que usted y sus amiguitos practiquen el fair play soon, but I can assure no matter your gimmicks on July the 2nd, eu estou aqui... procurando paz.



M@RCOcoyo;
UAQ, Qro; México;
05/05/12