Friday, January 28, 2011

DESORBITADOS



MARA Y DANN


Un día, el pasado otoño, mi hijo Peter Lessing, vino a decirme que acababa de escuchar un cuento en la radio sobre un hermano y una hermana huérfanos que vivía toda clase de aventuras, sufrían un sinfín de vicisitudes y terminaban viviendo felices y comiendo perdices. Se trataba de la historia más antigua de toda Europa.

_ ¿Por qué no escribes algo así?-me sugirió.
_ Por extraño que parezca -contesté-, eso es exactamente lo que estoy
escribiendo y ya casi he acabado.

Este tipo de cosas se da en las familias, pero quizá no tanto en los laboratorios.



多麗絲·萊辛
Doris Lessing


...

Una glaciación cubre todo el hemisferio norte.

No es posible que sea la única persona que se estremezca al oír que el estado más habitual de las regiones septentrionales del mundo es hallarse -en ocasiones- bajo kilómetros de hielo, no por causa de imaginarios vientos helados, ya que todos y cada uno de nosotros estamos provistos de ese poderoso talismán de supervivencia: no puede ocurrirme a mí, el cual nos impide flaquear rumiando posibles calamidades, sino al pensar que un día, dentro de miles de años, nuestros descendientes podrían decir: "En el período de 12,000 años que medió entre una glaciación y la siguiente, transcurrió todo un capítulo de la evolución humana, desde el salvajismo y la barbarie hasta la más exquisita civilización", todas nuestras civilizaciones y lenguas, y nuestras ciudades y destrezas e inventos, nuestras granjas y jardines y bosques, y las aves y las bestias que con tanto ahínco tratamos de proteger de nuestros estragos no ocuparán más que una frase o un parráfo en una larga historia. Pero tal vez se trate de un lapso de 15,000 años, tal vez menos, tal vez más, pues nuestros expertos afirman que la próxima glaciación viene con retraso, puede comenzar dentro de un año o dentro de mil.

...

Nuestra experiencia pasada nos ayuda a imaginar el futuro. Durantes los períodos glaciales más severos, el Mediterráneo estaba seco. Durante intervalos más cálidos, cuando el hielo retrocedía por un tiempo, los hombres de Neanderthal regresaban de su exilio en el sur para retomar la vida en los helados valles. Si no consideraban sus estancias en el sur como un exilio, ¿por qué regresaban siempre?

Quizás los hombres de Neanderthal resulten ser nuestros más legítimos antepasados y nos han legado nuestra extraordinaria diversidad, nuestra capacidad para vivir en cualquier clima o circunstancia y, sobre todo, nuestra fortaleza. Me gusta imaginármelos, con su enorme experiencia en el hielo, vigilando el avance de las blancas montañas.


Abril de 1998.



LESSING, D. Mara y Dann. Ediciones B. Primera Edición. 2005. Barcelona, España.




A short Little Ice Age in the northern hemisphere, mientras esperamos la próxima heatwave veraniega.


Heatwave - Boogie nights 1977

_ Bueno, yo me despido, estuvo chido escuchar todas esas teorías conspiratorias -le digo a uno de los compas con quien compartí el lonche a couple of hours before.

_ Esa es la forma preferida de desacreditarnos a quienes les da pereza pensar -me recuerda una de las máximas de los nutters, who do not want to rule the world, at least not yet.

Pinches Poquiteros

_ ¿Apoco tan pronto dieron color? -pregunto incrédulo, o más bien todo atontejado.

_ ¡Ay, Marco!; ¿pues qué no te lo avise con mucha anticipación que así era la forma de actuar de ellos? -me recuerda mi gran gurú de CU.


_ Eso y muchas cosas más, pero uno es así, porque me cuesta trabajo creer que sean tan poquiteros, carajo -contesto verdaderamente enchila'o.


_ Eso sí, tú seguro no lo crees, pero nadie experimenta en cabeza ajena, ¿no?

_ Así es, pero de perdis deberían leer al Ruy Pérez Tamayo, pa' que se enteren un poquito de como es el liderazgo de a devis de un grupo cientifico, o por lo menos wanna be -intento infructuosamente de justificar mi ingenuidad, en mi tierra, donde tienen menos tacto pa' dejársela cayetano a uno, le llaman de otro modo.

Atmospheric CO2
monitoring


"... el que pone la idea, pone la chamba..."


En forma preocupante, no solo hemos fallado quienes deberíamos formar los nuevos cuadros científicos, sino también les hemos comenzado a imbuir nuestras inoperantes mañas. Después de que, a pesar de tener unas armas más letales que granadas en las copias que llevaba bien ordenaditas en el folder, he dejado ganar (no, no se emocionen, no siempre los vamos a dejar salirse con la suya, consiste, por lo contrario, en saber en que causas enfocar nuestras baterías) a nuestra nena ($one of the bunch, for whom is impossible to make click with the real world), al escuchar que una involuntaria filtración le había otorgado una información que se suponía clasificada. Sin embargo, me sentí realmente decepcionado, no por escuchar sus supuestamente neutras (mas bien embarradas con el barniz de la despolitización) opiniones que han de ser traducidas en acciones hoy mismo, sino al escuchar la versión individualista de de atacar los problemas: "... aqui el que trae la propuesta, se lleva el trabajo...". Ooops!!! Todo mi andamiaje de solidaria organización ha quedado derrumbado en un dos por tres. Supongo -in the scientific sense, of course-, que estoy frente a un petit comité de almighty supermen. Menos pretencioso es este cientifico poblano que me hace varias sugerencias antes de retirarme de la capital de Denimland: "...Aguas, Marco; yo por experiencia propia no te recomiendo mucho que te concentres en una carrera en la academia de una universidad privada... eso sí, tienen un fuerte sentido de pertenencia, avanzas más rápido si eres producto de su cantera, a mi solo me aceptaron porque tenia un doctorado en el extranjero... te pagan menos por hora-clase que en 'nuestras universidades' ... ah, y no se te vaya a ocurrir criticar su sistema viniendo de otra institucion, segun ellos, 'rojilla', no matter they organise meetings designed precisely for academic feedbacks... pero, la neta, cuando ya me cayo el veinte, fue cuando una colega dejo literalmente su vida for speeding while trying to get to another lecture after leaving this private university, and I said, no way, no more...".


Now, como mi caso no es particular, esta semana al visitar una ONG private sponsored, uno de nuestros colegas nos comparte su experiencia propia: "Sí, nosotros ya teníamos el proyecto aprobado por una entidad europea con un presupuesto de 2 millones de euros; then, our government office decided to change from our departmet to a different one, money included, of course. Como a mí no me gusta esos enjuagues, contraataqué con un 'movimiento suicida': envié una carta al patrocinador europeo, renunciando a los fondos pa' la investigación. Obviamente, lo que siguió, como trabajaba, ya se imaginaran... por contrato, fuí despedido en forma fulminante, solo que ya había salido yo por la puerta grande, y no me apellido Guzman Loera, je, je".


En los comienzos del renacimiento, época de verdadero cambio de paradigmas, cuenta la leyenda que "el maestro" Verrocchio, encargó al aprendíz Da Vinci (todavía ha de tomar mucho tiempo para que sea universalmente reconocido solo por su nombre de pila), terminar un cuadro. Cuando el discípulo hubo terminado la tarea, y toca al supuesto mentor observar la obra terminada, fue tanto el impacto para el segundo, que a partir de ese momento ha de abandonar el pincel (uno de los más diestros de aquel período) para siempre. Desafortunadamente, creo que aún en los so called búnkers del conocimiento, es muy poco probable encontrar seres humanos de tal talla espiritual.


Cobijado por el poder real.



Back to the planet earth, I was in pig troubles, sorry, big troubles. Había perdido mi chaleco fluorescente (¿o fosforescente, mi estimado eddie?), y ya me había convencido que tendría que torear a los cuches, pardon, coches y sus considerados automovilistas (porque nuestro premiado greenie jefe capitalino está más concentrado en darle pa' 'delante a la supervía, que en "construir" las rutas necesarias pa' disminuir las emisiones de los GEI en la antigua Tenochtitlan), ya más de uno -como no soy un santo- se ha llevado una chiflada de máuser for their careful driving. Pues bien, como eso sí, soy un despistado, distraído, desordenado, entre la puerta de entrada y mi cubo, inadvertidamente había dejado caer y, en consecuencia, perdido la prenda. Al salir hacia mi cantón, y advertir lo que yo injustamente califiqué como hurto, de conejo no me bajaba, pero los supuestos "culpables" no se salvaban tampoco de mis más potentes maldiciones; right in the bottom line$, those who keep the wheels turning, have wisely realised of what was going on, así que, despreciando mi mítica dejadez, they got organised and distributed several fliers promising a huge reward if someone could give my vest back. Needless to say, that I had my item with me the morning after. Women Power working at its best on my side.


ñÑáéíóúÁÉÍÓÚ¿?¡!

M@ROCKET;

Callejón de San Pablo, Centro Historico; México, D.F.;

28/01/11;


MEMORY SHOTS:





*ENCORE DELL'NUOVO MONDO:



Especial Nochevieja con José Mota 2010 - Un papa americano












http://marcosalas.blogspot.com/2011/01/des-orbitados.html
http://creatividadsocialmentecomprometida.blogspot.com/2011/01/des-orbitados.html

Financial crisis commission defends Wall Street criminals

By Andre Damon

28 January 2011

The Financial Crisis Inquiry Commission, the body set up by the Obama administration to investigate the 2008 Wall Street meltdown, released its 633-page findings report Thursday morning. The commission, which concluded that the financial collapse was due to the “systemic breakdown in accountability and ethics,” deliberately refused, as a matter of policy, to name any individuals it suspected of malfeasance.

Facing journalists’ questions in a press conference Thursday morning, the panel moved to shield financial criminals from prosecution and the public view. By far the most frequent topic raised by reporters related to the absence of criminal accusations in the findings. One of the first questioners asked, “Did you find corporate criminal activity in the run-up to the financial crisis? If you did, why are those findings not included in this report?”

To this, panelist Brooksley Born responded, “Our mandate was to refer to the attorney general any individual that our investigation found may have violated US laws. We did make several such referrals, but we are not going to talk about any of those.”

In response to similar questions, the panelists got visibly frustrated and insisted that they would not disclose any details of criminal violations, how many they found or even confirm that any referrals took place.

All substantive questions were merely brushed off. One reporter asked whether the cases of accounting fraud by failed bank Lehman Brothers and other companies were bigger than Enron and WorldCom, two prominent corporate fraud cases that resulted in criminal indictments.

Phil Angelides, the panel’s chair, blatantly sidestepped the question, merely noting that the use of questionable accounting at Lehman Brothers was a “publicly known case” and that the inquiry had “looked into off-balance-sheet assets.”

These evasive responses were totally in keeping with the character of the commission, which was designed from the ground up to be as impotent and unobtrusive as possible. The panel’s composition bears notice. Its ten members were political and business figures largely unknown to the public. The chair of the panel, Phil Angelides, was treasurer of California and the unsuccessful Democratic nominee for the state’s governor in 2006. The only figure of any real national prominence was Brooksley Born, the former head of the Commodity Futures Trading Commission. The rest of the panel consisted of ex-CEOs, former bankers, think tank employees, and one former senator.

The timing of the announcement is also significant. The panel waited for a rebound in the stock market and a sizable rise in bank profits to issue its report, seeking out the time when the banks’ crimes were least in public view. The final release date of the report was announced only a week in advance, giving the impression that it was prepared beforehand and issued at the most convenient time.

Even as the panel held its press conference, the corporate elite gathered at the World Economic Forum in Davos, Switzerland, to call for even further cuts to regulation and the elimination of the minuscule reforms implemented in the 2009 Dodd-Frank financial reform bill.

These characteristics, together with the press’ willingness to treat the bank bailout as a dead issue, led to the findings being largely ignored by the major newspapers. Neither the Wall Street Journal nor the New York Times featured the story on their web site home pages on Thursday afternoon.

The report itself constitutes an exercise in defending the culpable parties through a combination of impotent moralizing and obscurantism. Where possible, the panelists sought to implicate the American public in the bankers’ fraud. Bob Graham, a panelist and retired senator, concluded his remarks with the words, “in sum, we reaped what we had sown.” Heather Murren, a panelist and former employee of Merrill Lynch, added that the causes of the crisis “stretched from the living room to the boardroom.”

Aside from overt attempts to blame the American public, the panel follows the now well-established model of spreading blame so broadly that accountability disappears. The panel concluded that “widespread failures in financial regulation and supervision proved devastating to the stability of the nation’s financial markets.” The panelists, particularly Angelides, adamantly proclaimed that regulators had the power to prevent the crisis, but failed to do so. Yet when asked by reporters whether the heads of the treasury and Federal Reserve were in any way responsible, Angelides sidestepped the question.

Apart from faulting regulators, the panel concluded that the crisis was caused by a “systemic breakdown in accountability and ethics” on the part of corporate executives.

This is a truism. Yet no major figure from either government or from the big banks has been prosecuted in connection with the financial meltdown. It defies belief that “a systematic breakdown of ethics” resulting in hundreds of billions in losses could take place in corporate boardrooms without any breaches of the law.

Despite its role as an official whitewash, the commission's findings contain some substantive information. For instance, the report admits the widely reported claim that Goldman Sachs, the most profitable Wall Street firm in history, received $2.9 billion as a part of the bailout of AIG, the failed insurance agency.

Prior to the release of the commission’s findings, commentators compared the inquiry to the Pecora Investigation, a series of hearings held in 1932 to investigate the causes of the 1929 Wall Street Crash. That inquiry, which was broadly followed by both the press and public, exposed numerous cases of fraud and abuse by dozens of companies and individuals.

By uncovering the depth of the fraud and speculation that led to the crisis, the inquiry forced the resignation of National City Bank president Charles Mitchell, and made public the fact that J.P. Morgan, Jr., the banker, had paid no taxes for the past two years. The numerous cases of fraud and parasitism unearthed by the commission sparked public outcry and calls for prosecution by major politicians.

Responding to a wave of anti-bank sentiment in the wake of the commission’s findings, the Roosevelt administration laid the groundwork for the financial regulation of the postwar period, creating the Securities and Exchange commission to prosecute financial fraud, and implementing the Glass-Steagall Act, which separated commercial and investment banking until its repeal in 1999.

The present commission has exactly the opposite character of the Pecora Investigation. Instead of shining light on the banks’ crimes, the commission aims to keep the circumstances of the crisis obscure, while preventing the prosecution of those responsible. In this, it follows the principle, laid down by the commission’s lead investigator in 1933, Ferdinand Pecora, “Legal chicanery and pitch darkness were the banker’s stoutest allies.”

The release of the inquiry commission’s report is a key step in the process of returning the financial system to “business as usual.” Over two years since the worst postwar financial crisis, there have been no fundamental changes implemented to the financial system and the banks have returned to their daily labor of gambling, fraud and speculation at the public expense.


Egypt, Tunisia, and the fight against US imperialism

28 January 2011

Two weeks after US Secretary of State Hillary Clinton warned Arab leaders that their region’s “foundations are sinking into the sand”, the growing revolutionary upsurge of the masses has revealed that the pillars of Washington’s own policy in the Middle East are rotten and crumbling.

The mass uprising that toppled the 23-year rule of Tunisian dictator Zine al-Abidine Ben Ali has now been followed by tens of thousands of young demonstrators in Egypt taking to the streets, defying security forces, and in increasing numbers giving their lives, to demand the downfall of Hosni Mubarak and his nearly three-decade-old regime. Thousands more demonstrated Thursday in the Yemeni capital of Sanaa, calling for the ouster of Ali Abdullah Saleh, who has ruled the country for more than 30 years.

In every case, masses of youth and workers have risen up against regimes that are synonymous with social inequality, corruption, political repression and torture and which have been firmly aligned with and largely financed by US imperialism. They have been driven to act by the same conditions of unemployment, rising prices and government abuse that led the young Tunisian Mohamed Bouazizi to set himself ablaze in protest, inspiring the demonstrations that swept his homeland.

These conditions have rendered life increasingly intolerable for millions of people throughout the region, while denying the younger generation any future. They are the legacy of an entire epoch of colonial domination followed by the inability and unwillingness of the bourgeois nationalist movements of the region to forge any independence from imperialism. Now these conditions of mass poverty and oppression have been deepened immensely by a historic crisis of world capitalism that has its center in the United States itself.

It is nearly a decade since the administration of George W. Bush, utilizing the September 11, 2001 attacks as a pretext, launched wars first in Afghanistan and then in Iraq, with the aim of exploiting US military supremacy to establish the unchallenged hegemony of American imperialism in the region. Having cost the lives of over a million people and drained the US economy of over a trillion dollars, these continuing wars and occupations have achieved none of their original goals, while deepening the hatred toward Washington throughout the Middle East and internationally.

During the heady days of imperialist triumphalism that accompanied the launching of these wars, the Bush administration proclaimed its support for a “freedom agenda.” It advanced the thesis that a “liberated” Iraq would serve as an inspiration for the masses of the region to embrace “freedom” and “democracy” while aligning themselves with the interests of the United States and Israel.

Washington’s purported support for democracy and free elections in the region was short-lived. A parliamentary election in Palestinian occupied territories delivered a clear victory to the Islamist Hamas movement, which rejected the framework of the US-sponsored “peace process” and the US responded by supporting an attempted coup and then a partition of the West Bank and Gaza, with the Palestinian people subjected to unceasing collective punishment for their choice at the ballot box.

Similarly, the recent coming to office of a government backed by the Hezbollah movement in Lebanon, in accordance with the rules of the country’s parliamentary system, has been treated by Washington as an illegitimate coup prompting threats of aid cutoffs and even military aggression.

In an interview on National Public Radio, Thursday, Graeme Bannerman, the former Middle East analyst on the US State Department Policy Planning Staff, voiced the real position of the US government—under both Bush and Obama—hidden by all of the rhetoric about supporting reform and human rights.

“Popular opinion in the Middle East runs so against American policies,” he said, “that any change in any government in the Middle East that becomes more popular will have an anti-American and certainly less friendly direction towards the US which will be a serious political problem for us.”

Nowhere is this more true than in Egypt. For 34 years, ever since Anwar Sadat made his trip to Jerusalem and subsequently signed the Camp David accords with Israel, the US has backed the military dictatorship headed first by Sadat and then his successor, Mubarak.

Egypt has served as the linchpin of US policy in the Middle East. In return, the US has lavished $1.3 billion in military aid upon the Egyptian regime every year. The bullets, tear gas and truncheons employed against the youth and workers demonstrating in Cairo and elsewhere bear the clear stamp of “Made in the USA.”

From the outset of the spreading revolt in the Middle East, official Washington has been taken aback by events. In Tunisia, just three days before Ben Ali boarded an aircraft and fled the wrath of his own people for exile in Saudi Arabia, US Secretary of State Clinton expressed her concern over the “unrest and instability” in the country, while extolling the “very positive aspects of our relationship” with the country’s longtime dictator. She insisted that Washington was “not taking sides,” as US trained and equipped troops were shooting down demonstrators in the streets.

Only after the downfall of its ally Ben Ali, did the Obama administration discover, in the president’s words, “the courage and dignity of the Tunisian people.” In his State of the Union speech he proclaimed that the US “stands with the people of Tunisia.” He extended no such verbal backing to the people of Egypt, where that very day riot squads and secret police thugs had carried out mass arrests and beaten demonstrators and journalists alike.

On Thursday, Vice President Joe Biden made clear the administration’s continued commitment to the hated dictatorship in Egypt. “Mubarak has been an ally of ours on a number of things. And he’s been very responsible … relative to (US) geopolitical interests in the region … to normalizing relationship with Israel,” Biden declared. “I would not refer to him as a dictator,” he added, insisting that Mubarak should not step down.

The unmistakable message is that if the Mubarak regime must resort to a bloodbath to prevent being overthrown by the masses in the streets, it will be firmly supported by Washington. All of the talk about urging the regime to carry out self-reform is utterly hollow. The time when the sclerotic Egyptian dictatorship of the 82-year-old Mubarak was even capable of such measures is long past.

Meanwhile, as the Wall Street Journal put it Thursday, “the US is trying to re-channel the spreading anger in the region.” It has dispatched Jeffrey Feltman, the top US State Department official for the region, to Tunis to oversee the maneuvers aimed at salvaging the Ben Ali dictatorship without Ben Ali. In Egypt, the arrival in Cairo of Mohamed ElBaradei, the Nobel Peace Prize winner and former head of the UN nuclear regulatory agency, may well signal the launching of a US initiative aimed at achieving a negotiated settlement.

Washington fears, above all, the entry into mass political struggle of the tens of millions of Egyptian workers. In a country where 40 percent of the population subsists at the poverty level of $2 a day or less, US-fostered “freedom” has been delivered in the form of “free market” capitalism, which has promoted wholesale privatizations, opening of markets and other measures that have enriched a thin layer at the top, while driving the bulk of the population into deepening misery.

The global capitalist crisis that is fueling the upheavals in the Middle East has its center within the United States itself. The debacle confronting Washington in the region is a telling measure of the deepening decline of US imperialism.

The workers of Tunisia, Egypt, Yemen, Jordan, Algeria and elsewhere in the region who are entering mass struggles will find their greatest ally in the working class of the United States, which is confronting the deepest attacks on jobs, living standards and basic rights in its history.

The demands of the workers and youth who have taken to the streets of Tunis, Cairo and other Arab cities for jobs, livable wages and democratic rights can only be achieved in a revolutionary struggle to put an end to capitalism, which is incapable of meeting even the most basic needs of the working population in any country.

The burning task posed by these events is the building of a new revolutionary leadership, fighting for the unification of the working class across national boundaries in the struggle for the United Socialist States of the Middle East and the Maghreb as part of the world socialist revolution. This means building sections of the International Committee of the Fourth International throughout the region.

Bill Van Auken


Ban Ki-moon ends hands-on involvement in climate change talks

UN secretary general will redirect efforts to making more immediate gains in clean energy and sustainable development

Yvo de Boer on Ban's green growth agenda



  • guardian.co.uk,
  • Article history
  • COP15 UN Secretary-General  Ban Ki-Moon
    UN secretary general Ban Ki-moon addresses the delegates at climate talks in Copenhagen in December 2009. Photograph: Attila Kisbenedek/AFP/Getty Images

    Ban Ki-moon, the United Nations secretary general who made global warming his personal mission, is ending his hands-on involvement with international climate change negotiations, the Guardian has learned.

    In a strategic shift, Ban will redirect his efforts from trying to encourage movement in the international climate change negotiations to a broader agenda of promoting clean energy and sustainable development, senior UN officials said.

    The officials said the change in focus reflected Ban's realisation, after his deep involvement with the failed Copenhagen summit in 2009, that world leaders are not prepared to come together in a sweeping agreement on global warming – at least not for the next few years.

    "It is very evident that there will not be a single grand deal at any point in the near future," said Robert Orr, UN assistant secretary general for strategic planning and a key adviser to Ban.

    The view from UN headquarters will likely dismay developing countries who fought hard at Copenhagen and last year's summit at Cancún for countries to renew their commitments to the Kyoto protocol in just that type of grand deal.

    UN officials say Ban will no longer be deeply involved in the negotiations leading up to the next big UN Framework Convention on Climate Change, meeting at Durban in December 2011.

    "He will continue to encourage leaders to aim for a higher level of ambition but there will need to be less day-to-day stuff," said one UN official. "The negotiations are very important, but it is the big-picture issues that he needs to be more engaged with."

    Ban will focus on broader issues of sustainability, which will be in the spotlight at a summit in Rio de Janeiro in 2012, marking 20 years since the first Earth summit.

    "Because the circumstances have changed, the nature of his engagement is changing," Orr said. "The relative balance of his time is shifting towards getting it done on the ground out there."

    UN officials, and those who closely track climate change negotiations, insist that Ban has not lessened his commitment to finding a solution to climate change. Ban has called global warming "the greatest collective challenge we face as a human family".

    "His heart is still there, and he does want to make a breakthrough in his tenure, but this might provide a better platform in the near future," said one UN official.

    However, they say he now believes there are more immediate gains to be made in mobilising international finance to support a green economy in developing countries than in trying to persuade world leaders to commit to deep cuts in greenhouse gas emissions.

    Others inside the UN system as well as in world capitals have been circling towards a similar conclusion as Ban: that gains in clean energy technology and energy efficiency could do more in the near future to reduce emissions. They could then drive the overarching deal that the UN still sees as necessary.

    "The idea that the world will gather together and parcel out emissions cuts among the various nations is probably a non-starter at this point," said Reid Detchon, vice-president for energy and climate at the United Nations Foundation, a Washington thinktank. "Whether it is in 2012 or 2013, the political consensus does not exist for a top-down approach."

    In operational terms, Ban's climate change advisory team, which grew to about a dozen people ahead of the Copenhagen climate summit in 2009, has shrunk to less than five people.

    Meanwhile, he is in the course of expanding his advisory team on sustainable development to about a dozen people ahead of the Rio meeting.

    "The things that are moving faster are the investments in renewable energy, the kind of actual investments and changes on the ground that will make a difference," said Tariq Banuri, director of the division of sustainable development at the UN's department of economic and social affairs. "There should be enough forums to accelerate and support those – some may have to wait for climate negotiations and some may not."

    Ban still believes an international agreement on climate change is essential, Orr said. "The sails haven't been trimmed. We are still going in the same direction, but we will have to tack back and forth between the multilateral negotiating process and national realities on the ground."

    The strategic shift by the UN secretary general in some ways mirrors thinking in Washington, where environmentalists are looking at how to many progress on climate change without votes in Congress or the regulatory help of the Environment Protection Agency (EPA).

    In the case of the UN, however, Ban's decision is not a product of failure. The climate negotiations at Cancún produced modest progress on some of the essential pre-conditions to a global deal, such as climate finance and forest preservation.

    The first public indication of a shift in direction was delivered in a speech to the UN general assembly on 14 January, in which Ban ranked sustainable development as the lead item on his agenda for 2011, ahead of climate change, human rights, security and humanitarian aid for Haiti.

    But UN officials and others who closely follow climate diplomacy say the UN chief had been considering how best to move forward on climate change at least since the failure of the Copenhagen summit.

    Ban has said repeatedly he sees climate change as the challenge of the generation. He staked his reputation as secretary general on gathering world leaders at Copenhagen, arguing that environment ministers and bureaucrats could not hope to command the authority to sign on to agreements that would essentially require the rewiring of their entire economy.

    The hands-on approach worked in 2007 when Ban stepped in to prevent a collapse of the Bali summit over George Bush's refusal to agree to emissions cuts.

    But the elevated hopes for reaching a final deal at Copenhagen resulted instead in acrimony and a tentative last-minute understanding among the big polluters that was not fully endorsed by the 190 countries in the UN negotiating process.

    The Cancún meeting, overseen by Christiana Figueres, managed to get the talks back on track, and some see Ban's disengagement as a sign of confidence in the negotiation process.

    "The phase the negotiations are going into now is one more of rule-making, rather than heads-of-state engagement," said Jennifer Morgan, who directs the climate and energy programme at the World Resources Institute in Washington. "It is just in a different phase than it was before, and the fact that Cancún was the moderate success that it was allows it to carry on the process in the way that it normally does with ministers and officials."

Thursday, January 27, 2011


Crisis en Egipto

Una nueva verdad en el mundo árabe

Foto
Un activista se enfrenta a los agentes antidisturbios, quienes impidieron la realización de una protesta del
Sindicato de Periodistas en el centro de El Cairo Foto Ap

Los papeles de Palestina son tan condenatorios como la declaración de Balfour. La autoridad palestina –hay que ponerle comillas a esa palabra– estaba dispuesta, y sigue estándolo, a ceder el derecho de retorno de quizá siete millones de refugiados al Israel actual, a cambio de un Estado que sería apenas 10 por ciento (cuando mucho) de la Palestina en tiempos del mandato británico.

Y mientras se revelan estos fatídicos documentos, el pueblo egipcio llama a derrocar al presidente Mubarak, y los libaneses eligen a un primer ministro que será proveedor de Hezbolá. Rara vez el mundo árabe ha visto algo así.

Para empezar con los papeles de Palestina, está claro que los representantes de ese pueblo están dispuestos a aniquilar toda esperanza de que los refugiados vuelvan a su patria.

Será –y es– un escándalo para los palestinos enterarse de que sus representantes les han vuelto la espalda. No hay forma de que, a la luz de los papeles palestinos, esos refugiados puedan creer en sus derechos.

Han visto en película y en papel que no retornarán. Pero en todo el mundo árabe –y esto no significa el mundo musulmán– existe ahora una comprensión de la verdad que antes no se tenía.

Ya no es posible que los pueblos del mundo árabe se mientan unos a otros. Se acabaron las mentiras. Las palabras de sus líderes –que son, por desgracia, también nuestras palabras– han terminado. Nosotros las llevamos a ese final. Nosotros les contamos esas mentiras. Y ya no podemos crearlas otra vez.

En Egipto, los británicos amábamos la democracia. Alentamos la democracia en Egipto… hasta que los egipcios decidieron que querían poner fin a la monarquía. Entonces los pusimos en prisión. Luego quisimos más democracia. Era el mismo viejo cuento. Así como queríamos que los palestinos gozaran de democracia, siempre y cuando votaran por quienes debían, así también quisimos que los egipcios amaran nuestra vida democrática. Ahora, en Líbano, parece que la democracia libanesa debe sentar sus reales. Y no nos gusta. Queremos que los libaneses, por supuesto, apoyen a los que nosotros amamos, los musulmanes sunitas partidarios de Rafiq Hariri, cuyo asesinato –según creemos con razón– fue orquestado por los sirios. Y ahora tenemos, en las calles de Beirut, incendios de vehículos y violencia contra el gobierno.

Y entonces, ¿hacia dónde vamos? ¿Podría ser, acaso, que el mundo árabe vaya a escoger sus propios gobernantes? ¿Podría ser que veamos un nuevo mundo árabe que no esté bajo control de Occidente? Cuando Túnez se proclamó libre, Hillary Clinton permaneció en silencio. Fue el chiflado presidente de Irán quien dijo estar feliz de ver un país libre. ¿Por qué ocurrió así?

En Egipto, el futuro de Hosni Mubarak luce aún más perturbador. Bien puede ser que su hijo sea su sucesor designado; pero hay un solo califato en el mundo musulmán, y ése es Siria. El hijo de Hosni no es el hombre que quieren los egipcios: es un empresario de peso ligero que lo mismo puede ser o no capaz de rescatar a Egipto de su propia corrupción. El comandante de seguridad de Hosni Mubarak, un tal Suleiman que está muy enfermo, tal vez tampoco sea el hombre.

Y en todo este lapso, esperamos ver la caída de los amigos de Washington en todo Medio Oriente. En Egipto, tal vez Mubarak esté preguntándose hacia dónde huir. En Líbano, los amigos de Washington se derrumban. Es el final del mundo de los demócratas en el Medio Oriente árabe. No sabemos qué vendrá después. Tal vez sólo la historia pueda responder esta pregunta.

© The Independent

Traducción: Jorge Anaya



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Dogging y el Manifiesto pornoterrorista

Pedro Miguel

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El deseo de llamar la atención parece ser un asunto natural. Hazme caso, expresan las mascotas, de diversas maneras, cuando se sienten un tanto relegadas por el amo: gimen, maúllan, ladran, trinan, brincotean por ahí, se frotan en las piernas de una persona, se cagan en la sala. Los humanos solemos llevar ese impulso a límites sorprendentes: no sólo queremos acaparar la atención de familiares, parejas, amigos, vecinos y compañeros de trabajo, sino que aspiramos a que los habitantes del siglo XXIII tengan noticia de nosotros. Tengo para mí que esa necesidad es fundamento de trayectoria para grandes artistas, estadistas afamados, gloriosos contorsionistas y redomados asesinos. La actitud del faraón Keops, quien para dotarse de un estuche mortuorio le ordena al arquitecto Hemiunu que construya la Pirámide de Guiza, no es muy distinta a la del chaval que maltrata la corteza de un árbol con una navaja y consigna: aquí estuvo Paco; la diferencia entre uno y otro sólo es de escala.

Algunos encontrarán que las miradas ajenas son demasiado intimidantes y realizarán sus proezas fuera de la vista del respetable; se encerrarán en un sótano y desde allí bombardearán al mundo con una serie de trabajos brillantísimos que les aseguren un futuro Premio Nobel; otros dejarán la huella de su paso por este mundo convenientemente escondida para que un biznieto remoto se tope con ella y descubra la grandeza hasta entonces ignota de su ancestro. Ya se sabe: la humildad es una modalidad extremadamente refinada de la arrogancia.

Pero hay otros que disfrutan de poner ante la vista pública partes pudendas o funciones que, por modales (es decir: por moda), debieran permanecer al margen de ella, como la muerte, el sexo y otras aun más bochornosas. O no es propiamente que disfruten, sino que consideran necesario impactar a la gente y obligarla a voltear a situaciones que, de manera legítima o no, están fuera del interés público. Es el caso de los que se empapan en gasolina y se prenden fuego en una esquina concurrida, los que se desnudan, se untan un líquido rojo y se tiran en la calle simulando ser reses muertas, y cosas así.

El exhibicionismo puede ser un convenio entre quien mira y quien es mirado: aderezo legítimo para las rutinas eróticas en la intimidad de dos, tres o unos cuantos más; acto de agresión, cuando el clásico tipo de gabardina muestra su erección a unas niñas que van pasando; a veces es un sacrificio impuesto, como cuando una víctima de explotación sexual es obligada a desnudarse ante los belfos babeantes de unos parroquianos borrachos.

O, peor aún, a morir a cámara, como ocurriría en las películas snuff, si es que esa clase de producciones no fueran una leyenda urbana generada por el cine comercial común y corriente, en el cual los asesinados, una vez filmada la escena de su muerte, se lavan la tinta roja, se cambian de ropa y se van a cenar a su casa.

Una de las exhibiciones que no dañan a nadie es el dogging, que se ha popularizado en Inglaterra de unos años a la fecha. Vamos a las fuentes en busca de una definición mínima:

“El dogging, o como se conoce en España, cancaneo, consiste en sexo al aire libre, tanto en coches como en bosques, pero siempre en lugares apartados, donde los asistentes pueden mirar o bien entrar al juego según los gustos de los participantes. El número de asistentes a estas ‘reuniones’ suele ser elevado, rozando la orgía. El éxito de esta práctica radica en que los asistentes no se conocen, sino que han quedado por Internet en un lugar concreto de su ciudad o pueblo, para llevarla a cabo. Este contacto previo se hace a través de foros, exclusivamente dedicados al efecto y con total seriedad.” Eso dice la página Dogging Spain, que agrupa a unos 55 mil doggadictos repartidos por toda la piel del toro.

Nada que ver, esas exposiciones consentidas, con la práctica medieval de introducir testigos a la cámara nupcial, en la noche de bodas, para certificar la pérdida de virginidad de la esposa. Aquello debe haber sido una mortificación para todos los participantes; quienes practican el dogging, en cambio, lo hacen por divertirse.

En 2007, la bloguera española Lubna Horizontal publicó, además de un Manifiesto pornoterrorista, una propuesta de masturbación colectiva en público:

Una masturbación colectiva en las calles, una masturbación de verdad, para l@s que se sepan correr de pie y para l@s que necesiten una esterilla y esparramarse en el suelo, para l@s que tarden en correrse, para l@s que necesiten ayuditas mecánicas, para l@s multiorgásmic@s... para tod@s aquell@s que quieran escandalizar o quieran ser escandalizad@s. No es una propuesta para quienes fingen un orgasmo cuando alguien les pide que se masturben. Quiero trasladar vuestros espacios íntimos masturbatorios a la vía pública y que os corráis como cerd@s en un bonito entorno cívico.

En meses recientes ha proliferado en algunas ciudades, la de México incluida, una actividad que, comparada con la anterior, huele a convento: recorrer algunas estaciones de metro sin más prendas que las interiores. Dependerá de lo que los policías entiendan por moral que apliquen, o no, sanciones administrativas.

El exhorto de Lubna Horizontal podrá ser estridente pero, para mortificación de las buenas (o de las malas) conciencias, resulta inofensivo. En México, los gobernantes panistas, y hasta algunos priístas, prohíben minifaldas, escotes y besos en público, y entre sus filas habría desmayos colectivos si llegaran a ver el dogging masificado o si atestiguaran la puesta en práctica de la masturbación colectiva que propugna la bloguera como acción de protesta escandalosa. Esos funcionarios no ven motivo de escándalo, en cambio, en el espectáculo visible y horroroso de cuerpos perforados a balazos, decapitados o descuartizados, en cadáveres de bebés calcinados en una guardería por el descuido y la avaricia de unos cuantos favoritos de la corte, en un pueblo famélico y aterrorizado que sobrevive como puede a la violencia institucional, a la miseria programada y a la destrucción sistemática del país por parte de un grupito de mafiosos que se solaza pensando: va para largo.


Mujeres periodistas en riesgo

Sara Lovera


MÉXICO, D.F., 27 de enero (SEMlac-apro).- En los últimos cuatro años, dos mujeres periodistas perdieron la vida mientras cumplían su misión y alrededor de 20 recibieron amenazas de muerte o fueron atropelladas y perseguidas. María Esther Aguilar sigue desaparecida. Y la valiente Lydia Cacho todavía no se siente segura.

Este es el panorama que confrontan las mujeres dedicadas a esta profesión en México, lo que, en opinión de Brisa Solís, las coloca en una situación de alta vulnerabilidad.

Brisa Solís es directora ejecutiva del Centro Nacional de Comunicación Social (Cencos), el primer organismo que inició la defensa de periodistas desde la década de los setenta.

En entrevista con Servicio de Noticias de la Mujer de Latinoamérica y el Caribe (SEMlac), la ejecutiva de Cencos aseguró que no hay garantías ni voluntad política en México para respetar la libertad de expresión, ni para investigar los 11 asesinatos de periodistas sucedidos en 2010.

Tampoco se atienden las denuncias, pese a que existen al menos cinco instancias gubernamentales que han ofrecido su intervención para frenar la agresión contra periodistas.

Solís recordó que la periodista Anabel Hernández hizo público, el 1 de diciembre de 2010, que existe un plan para atentar contra su vida, mismo que es instrumentado por funcionarios de la Secretaría de Seguridad Pública y elementos de la Policía Federal.

Las amenazas de muerte proferidas a Hernández, autora del libro Los señores del narco, que apareció en las últimas semanas de 2010, es una muestra de la impericia y el riesgo, dijo Solís.

Esas amenazas surgieron porque la última investigación de la periodista, publicada por la prestigiosa casa editorial Grijalbo, conjetura cómo las autoridades gubernamentales, militares y policíacas están relacionadas y protegen a los cárteles de la droga en México, al tiempo que muestra alarmantes complicidades en los altos círculos políticos y empresariales.

"Puso el dedo en la llaga", afirmó Solís. Pero lo más lamentable de lo que sucede en México es que mujeres y hombres periodistas que salen a realizar su cobertura informativa a cualquier parte pueden ser objeto de arbitrariedades.

El caso de Anabel, quien ha tenido todos los foros para denunciar --como lo hizo en su momento Lydia Cacho-- es emblemático. El problema es que otras y otros comunicadores no están en la misma situación, comentó.

La directora ejecutiva de Cencos recordó que el periodista Francisco Cruz relató el caso de Selene Hernández, una colega del Estado de México que en 2008 apareció ahorcada en un hotel. Sobre ese caso no existe a la fecha información o investigación alguna.

Según las autoridades, el crimen organizado es responsable de la persecución de periodistas, pero todas las investigaciones de organismos civiles indican que en 65% de los casos las amenazas provienen de funcionarios locales, gobernadores, jefes policíacos o caciques tradicionales. Y este es el problema.

Anabel narró que, tras la publicación de su libro, su informante le aseguró haber escuchado el plan para atentar contra su vida y hacerlo pasar por un accidente automovilístico, un robo o un intento de secuestro.

La periodista, quien colabora para la revista digital Reporte Índigo, presentó una queja ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y una denuncia ante la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal. El viernes 3 de diciembre, la PGJDF dictó medidas cautelares para Hernández, quien actualmente está protegida por escoltas.

Según Solís, ahora se pretende establecer, como sucede en Colombia o Guatemala, un mecanismo de protección permanente a los periodistas, iniciativa que se discute desde hace un año.

"Este 17 de enero las autoridades lo echaron a andar, sin formalidad alguna", denunció, luego de lo cual añadió que, además, las autoridades impidieron que en esa mesa de análisis participaran los afectados y trabajadores de la comunicación, lo que hace que esta situación se presente insegura, inconfiable y fuera de toda protección real.

Inmediatamente después reflexionó: "Nada ha detenido los ataques a periodistas" y no existe un solo caso investigado. No hay culpables detenidos ni expedientes para consultar, y eso hará que los organismos civiles, entre ellos Cencos, acudan este mismo mes a las instancias internacionales, detalló.

Solís afirmó que está en riesgo la periodista oaxaqueña Verónica Villalbazo, así como una veintena de publicaciones, amenazadas por diversas instancias locales o nacionales.

En México existen varias instancias gubernamentales para atender los problemas: una Comisión Especial en la Cámara de Diputados; una instancia especial en la Procuraduría General de la República; una visitaduría en la CNDH, y ahora este pretendido mecanismo, pero María Esther Aguilar, desparecida en Michoacán en noviembre de 2009, no aparece, y no se sabe quién la busca.

Cencos, que al mismo tiempo es un espacio de difusión para las organizaciones sociales, también ha estado en riesgo, porque desde ahí se investiga y da seguimiento a las denuncias, dijo Solís.

Y agregó que el trabajo periodístico de Hernández se ha enfocado, en los últimos años, en la documentación de actos de corrupción y abusos de poder por parte del titular de la Secretaría de Seguridad Pública, Genero García Luna, uno de los hombres más poderosos del gobierno y quien realiza los operativos contra el narcotráfico.

El informe 2009 de ARTICLE19 y Cencos documentó que 65% de las agresiones a periodistas provienen de funcionarios públicos. Esta situación resulta alarmante al considerar las obligaciones que en la materia ha asumido el Estado mexicano.

ARTICLE19 es una organización internacional de derechos humanos que trabaja en la defensa y promoción de la libertad de expresión en el mundo. Toma su nombre del Artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que reconoce el derecho a la libre expresión de todas las personas.

Cencos fue la primera organización en denunciar las agresiones contra periodistas en México, y busca promover la libertad de expresión y la libertad de prensa como un derecho individual de los periodistas, y como derecho colectivo de la sociedad en su conjunto.

Periodistas

La joven ejecutiva Brisa Solís y dos periodistas, José Reveles y Roberto Rodríguez Baños –el primero autor de varios libros especializados sobre la crisis de criminalidad y persecución que se vive en México, y el segundo coordinador de una mesa de periodistas de Capital 21, la TV por Internet del gobierno de la capital–, examinaron para SEMlac la peligrosidad de la profesión de periodista en este país.

Los tres explicaron que en México hay una fragmentación de las denuncias y los atropellos, que no sólo vulneran la libertad de expresión y ponen en riesgo a hombres y mujeres periodistas, sino que esas situaciones las viven también las mujeres y hombres integrantes del campesinado, sindicatos, organizaciones sociales y feministas.

Tal es el caso de la defensora de los derechos humanos Marisela Escobedo, asesinada el 16 de diciembre pasado –pese a tener vigilancia y protección–, frente al palacio de gobierno del estado de Chihuahua, donde se mantenía en plantón para exigir un avance en las investigaciones sobre el asesinato de su hija Rubi, quien fue asesinada por su novio en agosto de 2008.

La ejecutiva y los dos periodistas señalaron que no existen, en esta fragmentación cobijada por el gobierno, instancias de coordinación, y unas y otras autoridades se pasan la responsabilidad.

Ante ello, urgieron a cumplir los compromisos acordados en 2003 y 2004 en diversos foros internacionales para garantizar la vida e integridad de los periodistas, crear mecanismos de diálogo y realizar investigaciones creíbles y responsables. Hasta el momento, nada se ha hecho.

De acuerdo con Rodríguez Baños, apenas el pasado lunes 17, el secretario de Gobernación, Francisco Blake, dijo que el Estado mexicano tiene todos los recursos para garantizar un clima de seguridad en el país, algo que ruboriza por absolutamente falso.

Cada día, recordó, "leemos en los medios cómo caen ejecutados, cómo hay balas que matan a cualquier civil, y unos 20 mil niños han quedado huérfanos".

Por su parte, Solís ha sostenido que en el gobierno no hay sensibilidad alguna, y puso como ejemplo la falta de protección a las y los migrantes procedentes de Centroamérica, que frecuentemente son secuestrados a la vera del camino, mientras la autoridad simplemente "no hace caso".

Por ello, coincidieron en la entrevista a SEMlac, también urge crear un mecanismo social y civil integral, porque ahora, ante la confusa situación que vive México, "cada quien defiende lo que puede" en soledad o aisladamente. Y para los periodistas también hay una mesa de trabajo.

Eso, reflexionaron, hace recordar la docena de instancias creadas entre 1993 y 2004 alrededor del feminicidio en Ciudad Juárez, la veintena de recomendaciones internacionales y el anuncio de políticas públicas para recomponer el tejido social en esa ciudad fronteriza.

Sin embargo, hoy se sabe que se trata de la ciudad más peligrosa del país, donde no sólo no se ha frenado el feminicidio, sino que han sido asesinados una centena de jóvenes en casas de recuperación de drogadicción. Además, se han puesto bombas y no se puede circular.

Pronto se abrirá una casa de emergencia para periodistas perseguidos en la Ciudad de México, que será dirigida por el periodista Rogelio Hernández, quien afirmó que ya se han tocado todas las puertas, y nada pasa.

Ahora toca mantener la información y todo lo necesario para evitar el asesinato de periodistas, pero también de todas y todos los mexicanos.


George Soros tells David Cameron: change direction or face recession

Mix of tax increases and spending cuts unsustainable, speculator says, as World Economic Forum gets under way


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    George Soros speaks at the Seehof hotel, as the World Economic Forum gets underway in Davos, Switzerland. He has warned of a recesssion in the UK unless the government alters its economic policy. Photograph: Michel Euler/AP

    The international speculator George Soros warned David Cameron tonight that the government would push the British economy back into recession unless it modified its hardline austerity package.

    Speaking in Davos, Switzerland, the hedge fund owner who famously wrecked the reputation for financial competence of the last Conservative administration on Black Wednesday said the mix of tax increases and spending cuts planned by the coalition was unsustainable.

    Soros's suggestion that the UK needed a plan B came only hours after Cameron insisted in fierce Commons exchanges with the Labour leader, Ed Miliband, that there would be no change of government policy following the unexpected news yesterday that the economy contracted by 0.5% in the final three months of 2010.

    "I think they may be right in embarking on it [the austerity programme] but I think they will probably have the sense that they will have to modify it when the effects are felt," Soros said. "I don't think it can possibly be implemented without pushing the economy into a recession." Noting that the initial market reaction to the government's tough stance had been positive, Soros added: "We will have to see it unfold. My expectation is that it will prove to be unsustainable."

    Soros made his reputation in 1992, when his large-scale speculative attacks on the pound forced John Major's government to remove sterling from the exchange rate mechanism, and when Cameron was an aide to chancellor Norman Lamont. Soros's concerns came after a warning by Nouriel Roubini, one of the few economists to predict the financial crisis of 2007 and 2008. Known as Dr Doom for his pessimism, Roubini bracketed the UK with the weaker parts of the eurozone as a pocket of the global economy where there remained a risk of a double-dip recession.

    Comparing the outlook with that at the Davos economic forum in 2010, he said: "The tail risks of an outright double-dip recession and outright deflation are lower than they were last year, even if the data for the UK and the peripheral eurozone economies seems to suggest there are risks of a double dip."

    In the Commons, Miliband said the coalition's policies were "hurting but not working" and that it was time for ministers to change course.

    Echoing comments made by Mervyn King, the governor of the Bank of England, yesterday, the prime minister said it was inevitable that the recovery would be "choppy and it will be difficult".

    He added: "The worst thing you could do would be to ditch your plans on the basis of one quarter's figures." But Miliband said: "If you don't have growth, you will never cut the deficit."

Wednesday, January 26, 2011


Supervía: sobre reserva ecológica, colonias populares y zona residencial

Autor: Elva Mendoza
Sección: Portada

El trazo de la Supervía, realizado por la asociación civil Colegio de Ingenieros Topógrafos para Contralínea –a partir de las coordenadas publicadas en el decreto de expropiación–, muestra por primera vez la proyección de los cinco poligonales por donde pasará la vialidad de cuota. Los expertos observan un número indeterminado de afectaciones en zonas verdes y habitacionales que, aseguran, no ha sido informado por el Gobierno del Distrito Federal. Además, indican que serán necesarias nuevas expropiaciones para construir las llamadas “adecuaciones viales y obras complementarias”, previstas en el proyecto. El GDF afirma que no habrá más afectados

Elva Mendoza / Rubén Darío Betancourt, fotos

Tras un minucioso trabajo, miembros de la asociación civil Colegio de Ingenieros Topógrafos dicen a Contralínea que en los cinco poligonales que el gobierno de Marcelo Ebrard expropió –bajo la figura jurídica de utilidad pública– para la construcción y funcionamiento de una vía de peaje al interior de la ciudad, habrá un número indeterminado de afectaciones que aún no han sido dadas a conocer a la opinión pública.

El 6 de abril de 2010 se publicaron, en el Diario Oficial de la Federación, los cinco polígonos expropiados para la edificación de la Supervía Poniente. El impreso, de más de 40 fojas, no indica colonias o calles; sino coordenadas, vértices y rumbos propios del sistema Universal Transversal Mercator, ilegibles para los afectados, quienes se encuentran en la incertidumbre, pues no tienen claridad respecto de si su propiedad se localiza dentro de la zona que ya ha sido expropiada (pero que no han sido notificados) o dentro de las que serán expropiadas en el futuro.

El Gobierno del Distrito Federal únicamente notificó a 126 propietarios: 51 predios –incluido un centro religioso–, en la colonia La Malinche, de la delegación La Magdalena Contreras, y 75 predios en la delegación Álvaro Obregón (mayoritariamente localizados en la colonia La Angostura). Las expropiaciones en Contreras, dicen los vecinos, apenas suman 3 mil metros cuadrados, de un total de 8 mil 371 metros cuadrados que tendrían que ser expropiados, de acuerdo con los cálculos de los ingenieros topógrafos.

Según el decreto de utilidad pública, se requieren 336 mil 626.524 metros cuadrados para la construcción de la Supervía Poniente: 140 mil 596.630 metros cuadrados correspondientes al polígono uno; 35 mil 148.511, al polígono dos; 34 mil 261.601, al polígono tres; 113 mil 245.056 corresponden al cuatro, y 13 mil 374.726 metros cuadrados, al polígono cinco. En este último, mediciones de los ingenieros indican que la zona urbanizada es de 8 mil 371 metros.

Aunque el gobierno capitalino se empeña en declarar que para la construcción de la vía no habrá más afectaciones, e incluso más expropiaciones, el trazo realizado por miembros de la asociación civil de ingenieros, a partir de las coordenadas publicadas en la declaratoria de utilidad pública, revela que debido a la magnitud del proyecto, se decretarán expropiaciones subsecuentes, puesto que entre otras “adecuaciones” la empresa Controladora Vía Rápida Poetas, Sociedad Anónima Promotora de Inversión de Capital Variable, establece la ampliación de tres carriles a cuatro por sentido en la Avenida Luis Cabrera. “Se necesitarían 4 metros más, los cuales sólo se podrían obtener mediante afectaciones a las propiedades que se encuentran a las orillas de la vialidad”.

No obstante que el proyecto ejecutivo entregado por la concesionaria a la Secretaría del Medio Ambiente carece de planos respecto de las adecuaciones y obras complementarias, en la décimo octava condición del Título de concesión para el uso, aprovechamiento, explotación y administración de la vía de comunicación urbana de peaje, el gobierno de la ciudad permite la ejecución de obras adicionales con el objeto de ampliar la vía “mediante la incorporación de tramos adicionales o derivaciones que puedan beneficiar el tránsito vehicular de la zona”.

Luego de revisar las coordenadas del decreto expropiatorio y los planos del proyecto entregados por Controladora Vía Rápida Poetas, los topógrafos determinaron que se trata de un proyecto incompleto. “Hacen falta algunos tramos de la vialidad, los planos contienen errores angulares que no permiten la coincidencia exacta entre los mapas y el trazo; carece de acotaciones y no hay certeza en cuanto a si es el trazo definitivo o se hicieron modificaciones”. Agregan que no están los planos de las afectaciones tanto en áreas urbanas como naturales, los cuales califican de “obligatorios”. “Seguramente existen, pero no los incluyeron en la versión pública”.

En entrevista, Pablo Fuentes, asesor de la consejera Jurídica Leticia Bonifaz Alfonzo, niega la posibilidad de más afectaciones a las zonas urbanizadas: “No faltan notificaciones o expropiaciones. Pagamos todas las indemnizaciones y todo el mundo se salió muy convencido”.

El asesor manifiesta que incluso hay un anuncio en el portal de internet de la Consejería Jurídica y de Servicios Legales del Distrito Federal que acredita su dicho. El aviso reza: “Estimado vecino. El Gobierno del Distrito Federal te informa: si no fuiste notificado de la expropiación para la realización de la Supervía Poniente, no sufrirás ninguna afectación en tu hogar o patrimonio familiar. Por tu atención y comprensión, mil gracias” (sic).

Cristina Barros, integrante del Frente Amplio Contra la Supervía Poniente de Cuota, asegura a Contralínea que, desde el anuncio de la construcción de la carretera, los vecinos esperan nuevas expropiaciones, e incluso afirma que tiene conocimiento de que funcionarios del gobierno de la ciudad se han acercado con propietarios que viven en Álvaro Obregón y en La Magdalena Contreras para negociar de manera directa la compra de sus casas: “Las autoridades no hacen uso de instrumentos legales, lo que deja en la indefensión y el anonimato a los dueños de los predios”.

Carolina es una de ellas. Su casa en la calle Malinche número 19 colindaba con la zona expropiada. Sus vecinos aseguran que los miembros de las dos familias, que habitaban la propiedad desde hace 35 años, fueron constantemente visitados y presionados por funcionarios del Gobierno del Distrito Federal con el objeto de que vendieran: “Fueron víctimas de presión sicológica; les cortaron el paso, no los dejaban entrar y les propusieron comprar la casa. Ya están con los trámites de la venta”.

Al respecto, Luis Miguel Cano, codirector de la asociación civil Litiga, Organización de Litigio Estratégico de Derechos Humanos (Litiga OLE), que lleva la defensa de los afectados, asegura que el estudio realizado por el Colegio de Ingenieros confirma la incertidumbre jurídica que vivía la ciudadanía, puesto que no se podía tener el conocimiento técnico para saber qué domicilios fueron expropiados.

El abogado recuerda que la demanda de amparo 605/2010, firmada por 320 habitantes en contra de la Supervía, se estructuró bajo tres categorías de afectados: quienes fueron expropiados y notificados; quienes pensaban que podían ser expropiados, pero carecían de certeza, y por quienes pensaban que no serían expropiados pero consideraban que la construcción de la Supervía violentaba sus derechos.

“Si el gobierno acude casa por casa para presionar a la gente argumentando que su casa ya fue expropiada y debe vender, y se usa esta medida como instrumento de presión, sin notificación de por medio y sin que ello trascienda a los medios, se les estaría negando su legítimo acceso a la justicia, lo que es terrible”, argumenta Cano.

Francisco López, abogado y habitante de la colonia La Malinche, dice no tener ninguna certeza de lo que abarcan los cinco polígonos que fueron expropiados, por que el gobierno no les ha proporcionado información, pero afirma que las 50 viviendas notificadas son apenas una pequeña parte de los 336 mil metros cuadrados requeridos para la construcción.

El también miembro del Frente Amplio Contra la Supervía Poniente de Cuota considera que el gobierno de Marcelo Ebrard ha actuado de manera “desproporcionada, inhumana, discrecional y con abuso de autoridad” en contra de los vecinos de La Malinche y los habitantes de la ciudad.

El movimiento ciudadano de resistencia pacífica que surgió a partir del decreto expropiatorio ha sido constantemente amedrentado por el gobierno capitalino. La más reciente agresión desafía, incluso, medidas precautorias que emitió la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF): se usó la fuerza pública el 1 de enero para tomar posesión de 50 predios de La Magdalena Contreras. A pesar de que el documento emitido por el organismo autónomo establecía que las autoridades no debían hacer uso de la fuerza pública durante el periodo vacacional, 800 granaderos se impusieron a los vecinos a las 06:30 horas del pasado 1 de enero de 2011.

GDF, sin prudencia política

Luis Fernando García, abogado perteneciente a la asociación civil Litiga OLE, explica que en la vía jurídica aún se encuentran en proceso el juicio de amparo 605/2010, un juicio de nulidad y una queja ante la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial. “Un gobierno prudente está obligado a esperar las resoluciones de los jueces para iniciar los trabajos”, comenta el abogado.

Sin embargo, para la Consejería Jurídica y de Servicios Legales del Distrito Federal, en voz de Pablo Fuentes, no existen elementos para que les sea dado el fallo a favor a quienes interpusieron el juicio de amparo ante el Juzgado Décimo de Distrito en Materia Administrativa del Primer Circuito en contra de la vialidad: “Esperamos que fenezcan los plazos de los amparos, que les den la negativa para iniciar los trabajos”.

A decir de Fuentes, “ningún amparo impide que una obra, de utilidad pública, se pare. La quieren detener poniéndose enfrente, y aunque los amparos siguen, estamos completamente seguros que los van a perder, pues no se les afecta. Quienes se oponen a la vialidad están por mero interés político”.

Cuestionados acerca del tema, los ingenieros aseguran a Contralínea que la vialidad, de 7.18 kilómetros de longitud y con costo de 4 mil 800 millones de pesos, no es de “utilidad pública” y dañará el manto freático de las áreas naturales protegidas.

El presidente de la Comisión de Medio Ambiente y Protección Ecológica de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal expresa a este semanario su simpatía por el proyecto, el cual, dice, favorecerá al medio ambiente y desahogará la zona Poniente. Aunque acepta que habrá afectaciones en suelo de conservación, confía en las medidas presentadas por la empresa en la Manifestación de Impacto Ambiental para “mitigar” el daño.

El legislador del Partido Verde Ecologista de México asegura que los afectados son una minoría que debe “sacrificarse” por el bien común, el de las 380 mil personas que transitarán la vialidad. “Trabajamos muy de cerca con el gobierno de Ebrard para construir la ciudad de vanguardia y vamos por buen rumbo”, concluye José Couttolen Güemez.

Para Juan Carlos Zárraga, diputado del Partido Acción Nacional, también miembro de la Comisión de Medio Ambiente y Protección Ecológica, la Supervía Poniente muestra las incongruencias y la intolerancia del gobierno de Marcelo Ebrard, quien se presenta ante la opinión pública como un alcalde verde.

Para la realización de este trabajo se solicitó entrevista con Marcelo Ebrard Casaubón, jefe de Gobierno del Distrito Federal, a través de su asistente Karina Moreno Ocampo y de Alfonso Brito, director de Comunicación Social. También con Fernando Aboitiz Saro, secretario de Obras y Servicios del Distrito Federal, a través de Fabiola Maldonado; José Ángel Ávila Pérez, secretario de Gobierno del Distrito Federal, a través de Fernando Arroyo; y con Héctor Hernández Llamas, subsecretario de Asuntos Metropolitanos, a través de Maritza Ordaz. Hasta el cierre editorial, no hubo respuesta.

Afectaciones en polígonos

Dentro del polígono uno, se encuentran La Barranca de Tarango y la casa de lámina de don Simón, quien llevaba habitando la zona desde hace más de 40 años. Contralínea lo entrevistó en junio de 2010, antes de que derribaran su casa. Nadie le informó que sobre su propiedad se construiría la vía.

En el polígono dos, que comienza en Calzada de Las Águilas, se encuentran el parque Las Águilas y la Barranca de Guadalupe. El trazo afecta por lo menos dos propiedades en la zona residencial y una cancha de futbol.

Los polígonos dos y tres afectan alrededor de 20 propiedades, además, dentro del área del polígono tres se encuentra la Barranca La Malinche.

La poligonal número cuatro abarca la Barranca Angostura y el predio La Angostura, donde habitan de manera irregular un grupo aproximado de 10 mil personas de escasos recursos.

El polígono cinco encierra parte del Área Natural Protegida La Loma, la Barranca Texcalatlaco y viviendas en la colonia La Malinche.

Contralínea 217 / 23 de enero de 2011