Argumenta que hay avances significativos en aquel país tras el golpe contra Zelaya en 2009
Normaliza México relaciones con Honduras; apoya vuelta a la OEA
Evalúa SRE que existe un ambiente favorable para el eventual retorno del depuesto mandatario
Georgina Saldierna
Periódico La Jornada
Domingo 1º de agosto de 2010, p. 5
El gobierno de México anunció ayer la normalización de sus relaciones diplomáticas con Honduras, luego de informar que instruyó al embajador acreditado en Tegucigalpa, Tarcisio Navarrete, que regrese a esa ciudad en los primeros días de la próxima semana, para reanudar sus funciones.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) informó que se tomó esta determinación tras conocer el informe de la Comisión de Alto Nivel de la Organización de Estados Americanos (OEA) –creada para analizar la situación del país centroamericano–, el cual “refleja avances significativos” del gobierno y de otros actores hondureños para resolver los problemas derivados del golpe de Estado contra el presidente Manuel Zelaya Rosales, en junio de 2009.
Resaltó la dependencia que el documento recoge los acuerdos con Zelaya relativos a su incorporación al Parlamento Centroamericano (Parlacen) y a otros aspectos de su seguridad y situación jurídica, los cuales crean un ambiente favorable para su eventual regreso a Honduras.
En un comunicado, la cancillería señaló que al normalizar las relaciones diplomáticas con el país centroamericano, el gobierno de México hace votos por que la medida contribuya a promover el entendimiento, la cooperación, la seguridad y el fortalecimiento de las instituciones democráticas en la región.
Subrayó que el informe de la comisión denota una actitud positiva tanto del presidente de Honduras, Porfirio Lobo, como del depuesto José Manuel Zelaya, para atender la problemática derivada de la irrupción militar.
Porfirio Lobo, presidente de Honduras, en un acto de la Organización Demócrata Cristiana de América, el viernes pasado en San SalvadorFoto Reuters
Los avances alcanzados contribuyen a formar un escenario más propicio para el entendimiento y la reconciliación, mediante el diálogo político y el fortalecimiento de la protección de los derechos humanos, agregó la dependencia.
Relaciones Exteriores argumentó que el tono y el contenido del informe se suman al planteamiento favorable de la mayoría de los países del Sistema de Integración Centroamericana (Sica) sobre la reincorporación de Honduras a esta instancia y a la OEA.
Sobre este último punto, la SRE dijo que el gobierno de México está en la mejor disposición para continuar el diálogo en el seno del organismo multilateral, con miras a la restauración de los derechos de Honduras en la organización que encabeza el chileno José Miguel Insulza.
El 28 de junio de 2009, las fuerzas armadas hondureñas perpetraron un golpe de Estado contra el presidente Manuel Zelaya, a quien detuvieron y expulsaron del país, con el apoyo de la Iglesia y políticos identificados con la extrema derecha y grandes empresarios.
Como otras naciones, México retiró un día después a su embajador Tarcisio Navarrete, en protesta por la acción militar. Desde entonces la relación diplomática con el país centroamericano se enfrió, mientras un encargado de negocios atendió la sede mexicana en Tegucigalpa.
La normalización de relaciones diplomáticas se produce luego de que Honduras logró regresar al Sica el pasado 20 de julio, y países de Sudamérica y Estados Unidos pugnan por el retorno de la nación centroamericana a la OEA.
Georgina Saldierna
Periódico La Jornada
Domingo 1º de agosto de 2010, p. 5
El gobierno de México anunció ayer la normalización de sus relaciones diplomáticas con Honduras, luego de informar que instruyó al embajador acreditado en Tegucigalpa, Tarcisio Navarrete, que regrese a esa ciudad en los primeros días de la próxima semana, para reanudar sus funciones.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) informó que se tomó esta determinación tras conocer el informe de la Comisión de Alto Nivel de la Organización de Estados Americanos (OEA) –creada para analizar la situación del país centroamericano–, el cual “refleja avances significativos” del gobierno y de otros actores hondureños para resolver los problemas derivados del golpe de Estado contra el presidente Manuel Zelaya Rosales, en junio de 2009.
Resaltó la dependencia que el documento recoge los acuerdos con Zelaya relativos a su incorporación al Parlamento Centroamericano (Parlacen) y a otros aspectos de su seguridad y situación jurídica, los cuales crean un ambiente favorable para su eventual regreso a Honduras.
En un comunicado, la cancillería señaló que al normalizar las relaciones diplomáticas con el país centroamericano, el gobierno de México hace votos por que la medida contribuya a promover el entendimiento, la cooperación, la seguridad y el fortalecimiento de las instituciones democráticas en la región.
Subrayó que el informe de la comisión denota una actitud positiva tanto del presidente de Honduras, Porfirio Lobo, como del depuesto José Manuel Zelaya, para atender la problemática derivada de la irrupción militar.
Porfirio Lobo, presidente de Honduras, en un acto de la Organización Demócrata Cristiana de América, el viernes pasado en San SalvadorFoto Reuters
Los avances alcanzados contribuyen a formar un escenario más propicio para el entendimiento y la reconciliación, mediante el diálogo político y el fortalecimiento de la protección de los derechos humanos, agregó la dependencia.
Relaciones Exteriores argumentó que el tono y el contenido del informe se suman al planteamiento favorable de la mayoría de los países del Sistema de Integración Centroamericana (Sica) sobre la reincorporación de Honduras a esta instancia y a la OEA.
Sobre este último punto, la SRE dijo que el gobierno de México está en la mejor disposición para continuar el diálogo en el seno del organismo multilateral, con miras a la restauración de los derechos de Honduras en la organización que encabeza el chileno José Miguel Insulza.
El 28 de junio de 2009, las fuerzas armadas hondureñas perpetraron un golpe de Estado contra el presidente Manuel Zelaya, a quien detuvieron y expulsaron del país, con el apoyo de la Iglesia y políticos identificados con la extrema derecha y grandes empresarios.
Como otras naciones, México retiró un día después a su embajador Tarcisio Navarrete, en protesta por la acción militar. Desde entonces la relación diplomática con el país centroamericano se enfrió, mientras un encargado de negocios atendió la sede mexicana en Tegucigalpa.
La normalización de relaciones diplomáticas se produce luego de que Honduras logró regresar al Sica el pasado 20 de julio, y países de Sudamérica y Estados Unidos pugnan por el retorno de la nación centroamericana a la OEA.
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