“El asunto está fuera de control”

raúl monge

México, D.F., 23 de junio (apro).- A las 19:00 horas del pasado viernes 20, el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, recibió una llamada telefónica urgente en sus oficinas del Zócalo.

Era Joel Ortega, el secretario de Seguridad Pública (SSP), quien, desconcertado, lo puso al tanto de los lamentables sucesos ocurridos en la discoteca “News Divine”, ubicada en la colonia Nueva Atzacoalco, delegación Gustavo A. Madero, donde, a consecuencia de un fallido operativo de supervisión –venta de alcohol y droga a menores de edad--, perdieron la vida, por aplastamiento, nueve jóvenes, dos policías preventivos y un agente de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF).

“Jefe, el asunto está fuera de control”, resumió Ortega Cuevas.

Ebrard le ordenó al jefe de la policía capitalina trasladarse de inmediato al lugar de los hechos.

El titular de la SSP acató la orden y se trasladó hasta la colonia Nueva Atzacoalco.

Una vez ahí, Ortega Cuevas volvió a llamar a Ebrard para darle un reporte pormenorizado de los hechos en la delegación que gobernó en el trienio 2000-2003.

“La situación está grave. Tenemos varios muertos”, resumió el titular de la SSP capitalina.

Ebrard le pidió que pusiera al tanto de la situación al procurador general de Justicia, Rodolfo Félix Cárdenas.

Ortega así lo hizo.

Las evidencias

La tarde del lunes 23, Ebrard citó en sus oficinas a diversos representantes de medios de comunicación para darles a conocer dos videos del fallido operativo en la delegación, con base en los cuales la PGJDF está apoyando la investigación sobre los lamentables sucesos: uno de los videos fue grabado por el exdirector Regional Norte de la SSP, Guillermo Zayas, quien se encuentra detenido, y, el otro, por personal del área política de la delegación Gustavo A. Madero.

Un dato que llama la atención es que el primer video, de 21.40 minutos de duración fue editado por el propio Zayas, aparentemente con intenciones de eludir su responsabilidad, confió el propio jefe de Gobierno.

“Es posible que Zayas haya tratado de evitar que se vea cómo los policías bloquearon la puerta salida”, dijo Ebrard.

En la ronda de peguntas y respuestas, el jefe de Gobierno agregó que Zayas “tomó decisiones equívocas y cometió graves errores durante el operativo”.

Comentó, por ejemplo, que el funcionario, quien a principios el sexenio fungió como director de Homicidios de la PGJDF, entró a la discoteca para hablar con el encargado y después salió “para conseguir más camiones porque el único que llevaron se había llenado”.

Ebrard precisó que ese fue el momento crítico porque la policía tapó, durante varios minutos, la puerta de acceso y salida de la discoteca.

Cuando Zayas regresó y escuchó el griterío de los jóvenes ordenó a sus subalternos que se abrieran, pero ya fue demasiado tarde. Algunos jóvenes perdieron el sentido y fueron aplastados por la turba.

Según Ebrard, el procedimiento indica que el mando del operativo debe tomar el control de la situación, es decir, del micrófono para evitar el pánico. Indicó que Zayas también incurrió en un grave error al permitir que la policía bloqueara la salida de los jóvenes y, por si fuera poco, añadió, abandonar el lugar de los hechos.

Los videos muestran, en efecto, como los jóvenes desvanecidos son auxiliados por sus propios compañeros, familiares o policías, sin el menor cuidado.

En uno de los videos, se ve cómo el encargado de la discoteca reclama a una funcionaria de la delegación Gustavo A. Madero por el maltrato policíaco. Y tiene razón. En otro de los videos se ve a los policías goleando a los jóvenes, cuando salían de la discoteca propiedad de Adelina Hernández Islas, a quien ya busca la policía.

El procurador Félix Cárdenas comentó que aparte de Zayas, se encuentran detenidos el administrador de la discoteca y varios empleados. Dijo que también se está tomando declaración ministerial a 12 mandos de la policía capitalina, entre ellos el subsecretario Luis Rosales, quien, dijo, debió haber estado enterado del operativo.

Zayas está acusado de homicidio culposo que, por la gravedad, no alcanza fianza. El exdirector Regional Norte se encuentra hospitalizado por un problema de diabetes.

Al peguntarle a Ebrard si la investigación alcanzaría al secretario de Seguridad, Joel Ortega, el funcionario subrayó que no.

--Pero cabe la posibilidad de que el presidente Felipe Calderón pueda destituirlo.

--No me gusta hacer conjeturas --respondió Ebrard.

El jefe de Gobierno comentó que la investigación sigue cuatro rutas distintas:

--Los dueños y socios de la discoteca, así como la historia administrativa del lugar que no tenía cupo más que para 500 personas y en el que se presentaban shows de bailarinas. Durante el operativo, se encontraban en el lugar dos niñas de no más de ocho años de edad.

--La actuación de la policía que abarca a 12 mandos.

--Las autoridades delegacionales.

--Los testimonios sobre presuntas vejaciones y abuso de poder.

“Vamos a llegar hasta el fondo”, prometió Ebrard, quien presumió de que nadie antes había tomado una decisión como la que él decidió, de consignar a altos mandos de la policía.