Un ajedrecista guerrillero



arturo rodríguez garcía

* Detenido en Costa Rica, miembro de las FARC, militante de la APPO y vinculado con el EZLN; para sus padres es un joven ejemplar que emigró al DF para enseñar ajedrez a discapacitados

Monterrey, N.L. 19 de mayo (apro).- Alrededor de las 13:00 horas del 14 de mayo, Honorato Cerda y su esposa, María Idalia Guajardo, ya habían intentado varias veces comunicarse con su hijo Glen, quien supuestamente vive en la Ciudad de México, cuando el reportero Raymundo Pérez Arellano llegó a su domicilio para entrevistarlos.

Hasta entonces, la modesta familia residente de Guadalupe, Nuevo León, se enteró de que su hijo, quien se dedica a enseñar ajedrez a discapacitados, está detenido en Costa Rica, donde el pasado lunes se entregó y solicitó asilo político.

Glen reveló que es miembro de la Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que es militante de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) y que tiene vínculos con el Ejercito Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), así como con los círculos bolivarianos de Venezuela.

A partir de la incursión de militares colombianos en territorio ecuatoriano, el pasado 1 de marzo, trascendió la presunta vinculación de mexicanos con las FARC.

El manejo del gobierno mexicano respecto al caso, así como los señalamientos del gobierno colombiano, han mantenido bajo un alud de acusaciones a la mexicana Lucía Morett, sobreviviente del ataque en el que murió Raúl Reyes, el segundo hombre en importancia de ese grupo guerrillero.

El diario La Extra, de San José, Costa Rica, en su edición del martes 13 de mayo, dio a conocer que éste es la tercera ocasión que las autoridades costarricenses detienen a Glen Cerda, quien hoy cumplió 28 años de edad.

La información de ese diario, retomada en México por la agencia Notimex, consigna que la ministra de Seguridad Pública, Janina del Vecchio, catalogó a Glen Cerda Guajardo, como “una persona muy extraña”.

Además, el periódico dice que el regiomontano fue deportado la primera ocasión, cuando se internó en Costa Rica con una falsa identidad venezolana.

“A él lo deportaron en el 2006, esta es la tercera vez que ingresa al país de forma ilegal, entrando por un punto ciego de la frontera norte”, dijo Del Vecchio a La Extra.

Sin aportar mayores detalles, la funcionaria afirmó que Glen Cerda tenía entre sus pertenencias información que confirmaba su presencia en los campamentos de las FARC.

Ajedrez, Marx e ingeniería

En la calle Cerro del Potosí, colonia Cerro de La Silla, un barrio popular de Guadalupe, Nuevo León, conurbado a Monterrey, Honorato Cerda sostiene en sus manos un fólder con decenas de diplomas obtenidos por Glen en torneos de ajedrez.

La modesta vivienda del matrimonio Cerda Guajardo, está inconclusa, exhibe castillos solitarios, sus paredes exteriores no tienen “enjarre” y bajo la sombra del árbol, tres tambos para acopio de agua son custodiados por un pequeño guardián, Felpudo, un can de raza indeterminada.

“Yo creo que no tenía dónde comer o pasar la noche, por eso dijo que era guerrillero”, reflexiona el padre de Glen.

A unos metros, otro de sus hijos, Irving, especula:

“Creo que es una estrategia de mi hermano, porque él es un estratega nato.”

Las manos de la madre sostienen una Biblia. Y es ella la que asegura que el 4 de abril, Glen salió de Monterrey con destino al Distrito Federal, donde supuestamente viviría.

Antes de esa fecha, vivía en otra colonia popular de Monterrey, la Florida, junto con tres amigos que se cooperaban para el alquiler.

“A mi hijo le gusta leer mucho, tiene muchos libros de ajedrez, le gusta mucho Marx y Engels… siempre quiso estudiar ingeniería”, revela María Idalia.

Las lágrimas asoman bajo las gruesas gafas de Honorato, quién se culpa: “Esto está pasando porque yo no pude darles más educación.”

En el mismo fólder alberga las menciones honoríficas de sus cuatro hijos, a quienes describe como “niños con un alto coeficiente intelectual”, que ganaron todos los premios de excelencia en las escuelas donde estudiaron hasta la preparatoria.

Sobre Glen abunda en sus preocupaciones sociales, que lo llevaron a enseñar ajedrez gratis, durante los últimos años, en escuelas primarias y secundarias y, posteriormente, a niños con discapacidad. Inclusive, menciona que presidía la Asociación Nacional de Ajedrez para Personas con Discapacidad.

“De guerrillero, nada; él es un hombre alto y fuerte pero no le gusta la violencia, jamás creeríamos que es guerrillero”, dice su madre.

--¿Ya hicieron contacto con la cancillería o el consulado mexicano? –se les pregunta.

--Hemos estado hablando pero nadie nos dice nada, no nos responden, por eso le pido a usted que le den un mensaje a mi hijo, díganle que ya se venga para acá.

Hasta el cierre de esta edición, la Secretaría de Relaciones Exteriores no había dado a conocer el estatus de Glen Cerda, ni ha respondido las llamadas del matrimonio.