Cuba y la gerontocracia revolucionaria

JUAN BALBOA

Las autoridades cubanas lo reconocen: el futuro de la Revolución está en las manos de las generaciones jóvenes. Sin embargo, en la cúpula del poder predominan los ancianos. La mayoría de los miembros del Buró Político del Partido Comunista de Cuba –máxima instancia de poder en la isla– son septuagenarios. Su primer secretario, Fidel Castro, cumplirá 83 años este jueves 13. Se requiere "sangre nueva" en la dirección del país, claman los famosos cantautores Pablo Milanés y Silvio Rodríguez.



LA HABANA.- Medio siglo después del triunfo de la revolución cubana, el expresidente Fidel Alejandro Castro Ruz cumplirá 83 años el próximo 13 de agosto con una aparente recuperación de su salud –tema que permanece como secreto de Estado–, pero con una creciente incertidumbre de la sociedad por la longevidad de los máximos dirigentes del Partido Comunista de Cuba (PCC) y del Consejo de Estado, su gobierno, que promedian una edad de 70 años.


El líder histórico de la revolución cubana celebrará el jueves 13 un año más de vida encabezando el Buró Político y el secretariado del PCC, los dos fuertes órganos de poder del partido único en la isla, integrado en su mayoría por quienes combatieron en el Ejército Rebelde de la Sierra Maestra contra de la dictadura de Fulgencio Batista, a finales de los 50.


La edad de los máximos dirigentes es tema dentro y fuera de Cuba. Se ha vuelto tan incómodo que el propio presidente Raúl Castro trató de atajarlo públicamente el pasado 1 de agosto durante la clausura del Tercer Período Ordinario de Sesiones de la VII Legislatura de la Asamblea Nacional del Poder Popular, su parlamento:


"Hay quien dice que en los círculos de poder estadunidenses se esperará a la desaparición de la generación histórica de la Revolución; una apuesta tenebrosa en torno al llamado 'factor biológico' o, lo que es lo mismo, la muerte de Fidel y de todos nosotros.


"Quienes así piensan están condenados al fracaso porque las generaciones de patriotas revolucionarios que nos sucederán –en primer lugar, nuestra magnífica juventud– nunca se desarmarán ideológicamente. Junto a ellas y al partido, en la primera línea estarán para siempre los Mambises del siglo XXI: nuestras gloriosas Fuerzas Armadas Revolucionarias", dijo Raúl Castro.


El mandatario cubano intentó desestimar los rumores, que circulan dentro y fuera del gobierno y del país, sobre la posibilidad de que se ejerzan cambios radicales tras la muerte de los dirigentes históricos.