El mundo al revés: Lajous revela el desperdicio de gas y la contaminación con Nitrógeno de Cantarell

• Adrián Lajous decidió la EXPLOTACIÓN IRRACIONAL del yacimiento

Nicolás Alfredo Hernández Peñaloza / Comité Nacional de Estudios de la Energía Tabasco

Cantarell es el yacimiento más grande que ha tenido México y el sexto en dimensiones, descubierto en el mundo. Se localiza en la Sonda de Campeche a 80 kilómetros de Ciudad del Carmen y ocupa más de 130 km2 bajo tirantes de agua de 35 a 40 metros.

A la fecha se conforma por cinco campos: Akal, Nohoch, Chac, Kutz y Sihil, correspondiendo al primero más del 90 % de la reserva y producción del complejo. Iniciada su operación en 1979 manteniendo una producción promedio de un millón de barriles por día.

En 1995 se define un nuevo plan de explotación en el cual se contempla preveer la pérdida de presión en el yacimiento. Estudios realizados por geólogos y petroleros de PEMEX, apoyados por consultores reconocidos demostraron que la recuperación de petróleo sería muchísimo mayor si se le inyectaba gas natural a que si se le inyectaba nitrógeno. Estamos hablando de lograr una producción adicional de dos millones de barriles de aceite y de 550 millones de pies cúbicos de gas por día, durante cinco años más. Estamos hablando de un valor de petróleo de 200,000 millones de dólares. (Nota: El presupuesto anual de Tabasco ronda los 26,000 millones de pesos o 2,000 millones de dólares).

A pesar de esta información, Adrián Lajous, prefirió contratar por adjudicación directa a la compañía Netherland Sewell, una compañía sin experiencia ni equipo adecuado para realizar un estudio de esta envergadura. La conclusión preconcebida fue inyectar nitrógeno. En 1997, se inicia la licitación internacional para la realización de un proyecto privado que contempla la construcción de una planta de nitrógeno con una capacidad de producción de 1,200 millones de pies cúbicos por día, así como de todas las instalaciones auxiliares necesarias para transportarlo, ya comprimido, hasta Cantarell. La planta quedó instalada en Atasta, en los linderos de Tabasco. Era el inicio de los grandes negocios neoliberales en exploración y producción de PEMEX, sin importar que fueran innecesarios y perjudiciales al patrimonio de la nación y para el futuro de los mexicanos.

Cuando en yacimientos de este tipo la recuperación de la reserva llega a 90 % del petróleo original en Cantarell con el nitrógeno la recuperación no será mayor del 50 %.

El 25 de marzo, al impartir una conferencia en el simposio Transición Energética desarrollado en la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco, en Villahermosa; el ex director de Pemex Adrián Lajous expuso que PEMEX continúa una escandalosa quema de gas a la atmósfera lo que representa fuertes pedidas económicas al dejar de venderlo y daños al medio ambiente.

Dijo Lajous: "El efecto de la quema y la liberación de gas no fue menor; llegó a ser equivalente al volumen total de las importaciones públicas y privadas de gas, una vez descontado el contenido estimado de nitrógeno, y al 31 por ciento de las ventas de Pemex a terceros.

"En relación a su impacto ambiental, debe recordarse que el metano es un gas de efecto invernadero 25 veces más potente que el bióxido de carbono".

"La corriente de gas producida tenía un creciente y elevado contenido de nitrógeno, que impedía su comercialización, por lo que PEMEX tuvo que quemar volúmenes cada vez mayores de gas", explicó.

Lajous ante cerca de 400 jóvenes de la UJAT, sin el mínimo recató, doctoralmente afirmó: "El problema de la quema de gas natural es que no hay regulación en México para la quema de gas, y entonces, simplemente es una decisión interna de Pemex, no hay un regulador, como existen en casi todos los países petroleros, más o menos sensatos. "Sin duda alguna seguimos rezagados. Yo todavía no veo claro, ha habido mejoras, no hay duda, pero todavía no veo claro un salto verdaderamente cualitativo, en términos del cuidado que tenemos que dar al medio ambiente".

Recordemos que desde 1979 se ha quemado gas en cantidades industriales en la Sonda de Campeche y que hoy vivimos en el 2009.

Ahora, impunemente se trata de engañar a nuestras jóvenes generaciones, como se ha venido engañando legislatura tras legislatura, a diputados federales y senadores carentes de conocimientos (¿e interés?) para defender la riqueza nacional y los derechos sociales y laborales.

Al tiempo que esto ocurría, las tribus y empresarios de “izquierda” se ocupaban en la repartición de las candidaturas federales, ajenos a la urgente construcción de un proyecto de nación diferente al capitalista y al clamor de sus bases y a las propuestas de los trabajadores democráticos y sus especialistas.