2009-08-31
Han sustituido la pseudoefedrina por el ácido fenilacético para la fabricación de drogas sintéticas, ya que la sustancia entra a México en grandes cantidades
MÉXICO, D. F., 30 de agosto (UNIVERSAL) A partir de 2009 los cárteles del narcotráfico que producen drogas sintéticas comenzaron a sustituir la seudoefedrina por ácido fenilacético (af), sustancia que ingresa a México en grandes cantidades y su importación, exportación y comercio están regulados en un acuerdo de la Secretaría de Salud emitido en 1998.
Tan sólo en abril, en dos laboratorios clandestinos desmantelados en Apatzingán y Ziracuarétiro, Michoacán, se aseguraron alrededor de cinco toneladas y media del precursor, del que un sólo kilogramo o litro permite producir de mil a 25 mil dosis callejeras de metanfetaminas, de acuerdo con la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE).
Integrantes de “La Familia Michoacana”, uno de los principales fabricantes de drogas sintéticas, detenidos recientemente, han declarado que la organización delictiva adquiere los cargamentos del precursor directamente con proveedores de Holanda, Bulgaria o China.
El ácido fenilacético tiene usos muy variados en las industrias química y farmacéutica, entre ellos la síntesis de penicilinas y diversos fármacos, elaboración de perfumes, aromatizantes de bebidas y alimentos, edulcorantes, herbicidas, ésteres fenilacéticos y soluciones de limpieza.
Dos distribuidores del producto, ubicados en la zona metropolitana y que solicitaron no ser identificados, manifestaron no haber recibido, hasta ahora, alerta o notificación alguna de las autoridades sobre la importación del producto.
La gerente de ventas de una de las empresas dijo tener conocimiento de que la venta y las importaciones de ácido fenilacético están reguladas, y no pueden sobrepasarse las cantidades fijadas por la Cofepris.
“Si uno cumple con la ley, no hay problema’’, dijo, el gerente comercial de otra empresa. La regulación es resultado de un acuerdo emitido por el Consejo de Salubridad General el 23 de abril de 1998, el cual fija 20 y 50 kilogramos como cantidades máximas de la sustancia, permitidas.
El acuerdo advierte que quienes excedan dichas cantidades, así como a los terceros con quienes las realicen, les serán aplicables las disposiciones de la Ley Federal para el Control de Precursores Químicos, Productos Químicos.
En el mismo acuerdo se incluyen otras sustancias consideradas como precursores de drogas sintéticas por la JIFE, como el ácido sulfúrico y la acetona, que también han sido decomisados en grandes cantidades en laboratorios clandestinos o “cocinas’’, como las llaman los narcotraficantes.
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